Definitivamente lo mío con el pan no tiene remedio, hoy publico uno de los dos últimos que hice, una torta de pan dulce con almendra laminada y almíbar de anís que sabe a gloria. He llegado a la conclusión de que estoy enganchada a elaborar panes caseros, no me importa si son salados o dulces, lo verdaderamente importante para mí es meter las manos en la masa. Me parece fascinante amasar, ver como crece la masa durante la fermentación y olfatear su aroma cuando se cuece en el horno.
Para hacer la masa de mi pan dulce he fusionado dos recetas habituales en mi casa: larpeira gallega y bollos de leche. Mi sexto sentido me decía que si cada una de ellas está buenísima por separado unidas serían un escándalo, nuevamente la intuición no ha fallado, esta torta de pan dulce casera es un auténtico lujo. Un verdadero manjar que si comes un trocito, por pequeño que sea, no podrás resistir la tentación de repetir una y otra vez, te lo digo con conocimiento de causa.
TORTA DE PAN DULCE CON ALMENDRA Y ALMÍBAR DE ANÍS
INGREDIENTES / PREPARACIÓN (almíbar de anís):
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50ml de anís
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50ml de agua
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50g de azúcar
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Poner los ingredientes en una cazuela y llevar a ebullición.
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Hervir durante 5′, retirar del fuego y reservar.
INGREDIENTES / PREPARACIÓN (torta de pan dulce):
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500g de harina de fuerza
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200ml de leche tibia
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50ml de anís (licor)
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100g de mantequilla
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3 huevos (2 para la masa + 1 para pintar)
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30g de levadura fresca
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50g de azúcar
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2g de sal
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Láminas de almendra (al gusto)
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Azúcar humedecido con anís (para decorar)
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Almíbar de anís (para barnizar)
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Tamizar la harina, añadir la sal y mezclar bien.
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Fundir la mantequilla y batir dos huevos.
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Disolver la levadura en la leche templada.
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En un bol poner todos los ingredientes líquidos (huevos batidos, mantequilla fundida, leche con levadura y anís). Agregar el azúcar y batir para mezclarlos.
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Incorporar la harina, por tandas, removiendo continuamente hasta integrarla por completo. Amasar hasta lograr una masa suave y elástica.
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Formar una bola, colocarla en un recipiente engrasado y tapar con film transparente. Dejar que triplique su tamaño.
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Forrar una bandeja de horno con papel sulfurizado.
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Una vez que la masa haya levado desgasificarla ligeramente, ponerla sobre la fuente preparada y darle forma aplanándola con las manos hasta que tenga un grosor de 2 centímetros aproximadamente.
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Pintar la superficie con el huevo batido restante y esperar a triplique su volumen por segunda vez.
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Precalentar el horno a 180º, decorar la torta con láminas de almendra y pequeños montones de azúcar mojado con anís. Hornear 15/20 minutos (el tiempo de horneado depende de cada aparato). Retirar cuando esté dorada y ponerla sobre una rejilla.
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Barnizar la torta de pan dulce con el almíbar de anís mientras está caliente.
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Aguardar a que se enfríe.
Para conseguir una torta de pan dulce tierna y esponjosa no debes incrementar la cantidad de harina, si lo haces se amasa con más facilidad pero la masa quedará muy compacta y el resultado final del pan será denso y prieto. Para amasar cómodamente, y evitar que la masa se pegue, engrasa tus manos y la mesa de trabajo. Este paso es un poquito laborioso si no tienes amasadora y lo haces manualmente, para no desistir piensa que tu pan va a quedar súper esponjoso, húmedo y con un sabor impresionante.
Ten paciencia y respeta los tiempos de fermentación, el levado también es vital para obtener un pan dulce blando y jugoso. La espera merece la pena, disfrutarás como un niño con cada bocado.
Existen muchas recetas de pan dulce tipo brioche, esta es una más que puedes añadir a tu recetario, le sacarás mucho partido porque es perfecto para desayunar, en la merienda o como postre.
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