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Treinta años del álbum debut de Soda Stereo

Publicado el 26 agosto 2014 por Kike Morey @KikinMorey

Treinta años del álbum debut de Soda Stereo.01

“Sobredosis de TV, no creo poder resistir
y un aire demasiado tenso, si al menos estuvieras aquí.
Mi cuerpo procesado al ritmo de su corazón;
¡estoy desesperado! soy tan vulnerable a su amor”
Sobredosis de TV – Gustavo Cerati

El 27 de agosto de 1984 CBS Discos publicó para Argentina y otros países sudamericanos el álbum homónimo de la banda que con el correr de los años se convertiría, para muchos, en la agrupación más importante e influyente del rock en castellano en toda Latinoamérica: Soda Stereo.

Luego de diferentes formaciones en los primeros años de los ochenta, Gustavo Cerati, Hector “Zeta” Bosio y Carlos “Charly Alberti” Ficcichia tocan por primera vez juntos frente al público en una discoteca del barrio de Núñez a mediados de 1983. En los meses siguientes formarían parte del circuito underground de Buenos Aires con otros grupos como Sumo o Los Twist. Es en ese periplo en donde son escuchados por un cazatalentos musical que los invita a grabar profesionalmente para la CBS.

La producción del disco se la encargaron a Federico Moura, líder de Virus y padre de los “modernos” a finales de la última dictadura argentina. Moura era un referente de los nuevos sonidos que llegaban desde las islas británicas y uno de los promotores de la importancia de la imagen en la promoción de las bandas.

Moura dijo que su aportación al disco fue mínima porque “todos los temas tenían los arreglos resueltos y pensados”. En mi opinión, pecó de humilde. En sus inicios Soda estuvo influenciado por el ska de grupos como The Specials y el post-punk reggaetizado de The Police. Es cierto que temas como “Dietético”, “Afrodisíacos” o “Ni un segundo” suenan muy similares a las versiones demos o de sus presentaciones iniciales. Pero Moura consigue, por un lado, limpiar el sonido rudimentario y convertirlo en algo más estilizado –aunque todavía no tan virtuoso- ,y por el otro, incorporar en algunas canciones los teclados new wave como el de los primeros The Cure.

El resultado es un disco fresco, bailable y de gran impacto comercial. No es de los mejores discos de Soda, pero sirvió para posicionarse en la alborotada escena del rock argentino de la primera mitad de los ochenta e iniciar el camino a la internacionalización que se consolidaría un año después con la aparición de su segundo álbum: “Nada Personal”.

A continuación les comparto una breve reseña personal de las once canciones que forman parte de “Soda Stereo”:

Lado A

  1. ¿Por qué no puedo ser del Jet Set?: Había que arrancar el disco con este tema. Acelerado ska, festivo, gracioso y con toda la orquesta al pleno. Moura alivianó la letra inicial de Cerati para que tenga mayor conexión con el público pero mantuvo, o incluso aumentó, el ritmo de la música, acercándolo más al de sus presentaciones en vivo que al que se registró en las demos originales.
  2. Sobredosis de TV: El origen del sonido Soda tenía que ser el segundo track. Imagino a Cerati diciendo “sí, nosotros empezamos y nos hicimos conocidos por el ska, pero en realidad esta es la música que hacemos”. De por sí, sirvió para la presentación oficial del álbum en diciembre del 84: se colocaron 26 televisores encendidos, sin sintonizar, como fondo de la canción. Repitieron el efecto cuando los Soda anunciaron su regreso a los escenarios para la gira “Me verás volver” del 2007.
  3. Te hacen falta vitaminas: Luego del sonido Soda había que volver a lo que funcionaba. El otro ska por excelencia de la banda ya había sido editado en demo y se había propalado en algunas radios y discotecas de la capital. Moura lo perfila, lo pule y le pide a Cerati que por favor cambie ese engolamiento en su voz tan poco soportable. Fue la última canción con la que la banda se despidió del público en el último concierto de la gira del 2007. Como para revalorizar sus propios comienzos y cerrar su carrera de forma circular.
  4. Trátame suavemente: Compuesta por quien es considerado como uno de los tantos “cuarto Soda”, Daniel Melero, quien además aparecería en este disco como tecladista invitado y que años más tarde sacaría con Cerati el disco electrónico-experimental “Colores Santos”. Probablemente la balada por excelencia del rock en castellano, fue publicada por Soda antes que por la banda de Melero, “Los Encargados”. Soda no volvió a editar un tema tan cursi ni romántico en su carrera, pero nunca renegó de él. Varios como yo tampoco.
  5. Dietético: El primer video-clip de Soda, aunque fuera grabado con la versión demo. Malísima, la peor de todo el disco. Se nota que se armó de atrás para adelante: la frase “el régimen se acabo” haciendo referencia al fin de la dictadura se acompaña de unos muy buenos arreglos. Pero como Soda se quería presentar como un grupo light, sin ningún tipo de compromiso político, había que inventarle una canción. Y salió este desastre.

Lado B

  1. Tele-Ka: El lado B es musicalmente más elaborado e interesante que el A y empieza con la canción más rara de todas. Falsetes que recuerdan al timbre de Sting y guitarras que suenan a lo Andy Summers, fue la primera de Soda que se programó en la radios del Perú. Parte de su encanto son las voces graves que hacen el contrapunto a Cerati. Yo me quedo con el puente y los arreglos al final del tema.
  2. Ni un segundo: Mi favorita, perfecta en su concepción y genial en su ejecución. La incursión de los teclados y sobretodo el magnífico bajo de Zeta –registrado como autor del tema- acompañan a la apurada y ansiosa letra de Cerati. Sonido new wave que, aunque menos bailable, perduraría en los siguientes discos.
  3. Un misil en mi placard: La más Police del disco. Reggae blanco que escribió Cerati inspirado en una caricatura de Playboy. El misil del título no es más que un consolador. Nada de canción antibelicista ni referencias a la guerra de las Malvinas. Otra vez algunos tratando de dar una etiqueta de seriedad a un grupo “de música ligera”. Con todo, uno de los puntos más altos del disco. Fue versionada, con mucho acierto, en el unplugged realizado para la MTV en el 96. Me imagino que Cerati aprovechó para quitarse el sambenito de la clara influencia de Sting y los suyos.
  4. El tiempo es dinero: Canción gemela de “Ni un segundo” con referencias a Dorian Grey, el personaje de la novela de Oscar Wilde. Para remarcar que, aunque parecen, no son del todo superficiales y pueden hacer un tema moderno adaptando los clásicos de la literatura universal. Buen intento.
  5. Afrodisíacos: La “Dietéticos” del lado B. ¿Qué tiene que ver ese sonido introductorio, mezcla entre lo tribal y latino, con el concepto del disco? Para mí, nada. Sin embargo una vez que la canción empieza de verdad, a partir del canto de Cerati, la cosa mejora. La frase “bailando hasta cambiar la piel” refuerza el leitmotiv del LP.
  6. Mi novia tiene bíceps: Hipotético braintorming en la sala de grabación: “Basta de tanta búsqueda de sonido auténtico y volvamos a lo rentable. Hay que cerrar el disco con otro ska divertido. Vamos a poner “Te hacen falta vitaminas” al revés y lo llenamos con todos los instrumentos. Como si fuera un fin de fiesta total. Ah, y para el cierre le ponemos el riff de ‘Everybody Needs Somebody to Love’. Será espectacular”. Y así terminas de escuchar el álbum con una sonrisa en la boca y con ganas de volverlo a poner.

En general, es un disco divertido, que se escucha con facilidad y de éxito en cualquier fiesta ochentera. A nivel musical tiene una marcada tendencia a lo pop-rock comercial pero también contiene el germen de lo que sería el verdadero legado de Soda Stereo a la posteridad.

Mira aquí el video oficial de la versión demo de “Dietético” de 1984

Treinta años del álbum debut de Soda Stereo.02

Escucha el álbum “Soda Stereo” completo en este enlace de Spotify


Archivado en: Música Tagged: Afrodisiacos, ¿Por qué no puedo ser del Jet Set?, Carlos Ficcichia, Charly Alberti, Daniel Melero, Dietetico, El tiempo es dinero, Federico Moura, Gustavo Cerati, Hector Bosio, Mi novia tiene bíceps, Ni un segundo, pop-rock, reggae, ska, Sobredosis de TV, Soda Stereo, Te hacen falta vitaminas, Tele-Ka, Tratame Suavemente, Un misil en mi placard, Zeta
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