Tres hombres y eva

LAS TRES GRACIAS. RUBENS

"Ningún prejuicio merece más tal nombre que el que comúnmente se tiene sobre la desigualdad de los sexos... Una vez examinada según el principio de verdad, que consiste en no aceptar como verdadero nada que no se funde en ideas claras y distintas, resulta, por un lado, que dicha opinión es falsa, y que no se basa sino en un prejuicio y en una tradición popular, y por otro lado, que los dos sexos son iguales, esto es, que las mujeres son nobles, perfectas y capaces como los hombres. Lo que puede afirmarse con solo refutar a dos especies de adversarios: el vulgo y casi todos los doctos."
François Poulain de la Barre. De la igualdad de los dos sexos. París, 1673.
"La educación no debe tener por finalidad que la mujer se desarrolle, sino que renuncie a sí misma. Mientras que al hombre hay que instruirlo en todas las ramas del saber, a la mujer basta con impartirle algún conocimiento general de literatura, arte, música y naturaleza. Con ello se la hará patente lo estrechísimo de sus horizontes y su nulidad ante el Creador."
"El hombre es eminentemente creador, defensor. Su mente está hecha para la especulación y la invención; su energía, para la aventura, la guerra y la conquista. La mujer, en cambio, está hecha para mantener el orden, no para la batalla; su puesto está en la casa, donde es la reina."
John Ruskin. Sémamo y Lilas. (Segunda conferencia: "Queen's Gardens"). Londres, 1855
"La aserción de Ruskin de que las mujeres son mejores que los hombres es un fatuo cumplido que no debe suscitar en ellas sino una sonrisa amarga, pues en ninguna otra situación de la vida social se acepta que el mejor deba someterse al peor..."
John Stuart Mill. El sometimiento de las mujeres. Londres, 1869.