Tú sueña que “ellos” se encargarán de despertarte…

Así es la vida en este momento en este país, la gente sueña con nuevos proyectos, los crea, se deja mucho tiempo y dinero en ellos, pone ilusiones y proyecta todo de uno mismo en el duro camino de emprender; pero no sólo basta con las ganas y la ilusión, pues por ahí arriba existe gente que se encarga de hacernos la vida imposible de todas las formas en las que pueden, porque cada vez se ayuda más al rico, al que no trabaja ni se esfuerza, al que encima de tener mucho roba más, en cambio a los que estamos abajo, a los que intentamos hacer las cosas bien, a los que queremos que todos nuestros movimientos sean totalmente legales, a esos, no hacen más que ponernos la zancadilla y darnos continuas patadas en el culo.

Dicen que somos una generación que no nos esforzamos, que no trabajamos, lo que no dicen es que muchos lo intentamos y por su culpa tenemos que quedarnos en el camino.

Hoy finaliza aquí (por lo menos de momento) mi andadura como autónoma porque he hecho todo lo que está en mi mano: he puesto ganas, ilusión, ideas, proyectos, he dejado horas sin dormir o sin comer, he quitado tiempo de mi familia para intentarlo, sé que he hecho todo lo que estaba en mi mano, pero los que tienen que ayudarnos no lo hacen…y por eso yo ya no puedo seguir adelante.

Es vergonzoso que no tengas ningún tipo de ayuda a la hora de emprender (porque aunque pinten cosas muy bonitas y fáciles a la hora de la verdad no lo son), que aunque tengas que poner dinero de tu bolsillo y no tengas ningún tipo de ingreso te obliguen a seguir pagando entre 300 y 400 euros al mes, para que además, cada tres meses ellos se vuelvan a llenar los bolsillos con sus dichosas trimestrales. Si, porque hacienda somos todos, pero que curioso, ellos son los primeros que muchas veces cobran las cosas en B…

En otros países los autónomos no pagan los primeros meses, o pagan según ingresan, o tienen subvenciones reales, pero aquí las cosas siguen de mal en peor.

Conozco mucha gente que se ha lanzado a la aventura para luchar por lo que sueña, para crearse su propio empleo en estos tiempos tan difíciles, que dos o tres meses después lloran, se hunden, se desaniman porque no nos dejan seguir caminando, no nos dejan seguir creciendo, porque al final para ellos somos todos una mierda, porque se nos ríen en la cara y sobretodo porque saben que somos tan tontos que vamos a seguir manteniéndoles en el poder con sus casas, viajes y coches de lujo para que sigan viviendo a nuestra costa (no hablo de unos u otros, para mi todos son iguales, porque por lo menos hasta el momento no ha llegado nadie al poder que se haya preocupado por nosotros, por la gente normal).

Nos echan la culpa de todo (hasta de lo del ébola parece que tenga la culpa la pobre mujer), desvían nuestra atención con tonterías para que dejemos de estar pendientes de las cosas que pueden hacernos plantear cosas sobre ellos (véase el ejemplo del dichoso Nicolás) y al final nos siguen tratando como marionetas.

Los que me siguen y me leen saben que nunca me suelo pronunciar sobre estas cosas pero al fin y al cabo este es mi blog, esta es mi web, y tengo que aprovechar la poca libertad de expresión que nos queda.

En mi caso lo han conseguido, después de 7 meses dejo de ser autónoma; por mi parte ya no podré seguir adelante con las animaciones, eventos y las colonias infantiles; aunque por suerte no voy a desistir con mi proyecto y seguiré dando guerra con el blog, con los talleres, con las charlas, con las colaboraciones…no quiero renunciar a todo mi proyecto pero si se llevan una parte de mi sueño.

Hoy quiero animar desde aquí a todos los emprendedores que están en mi situación y decirles que sea cual sea su desenlace tienen que sentirse orgullosos por haberlo intentado, porque siempre he pensado que vale más arrepentirse de haber hecho algo que de no haberlo hecho nunca, y yo desde luego lo estoy, orgullosa y feliz de haber probado suerte en esta aventura y sobretodo agradecida a todo el mundo que va confiando en mi poco a poco, que asiste a mis charlas, a mis talleres, que me escribe, que me lee, sois los que me dais fuerzas para seguir; prefiero hacer las cosas gratis para vosotros que estar regalando dinero a todos esos que día tras día nos lo siguen robando.