Two Lovers, tristeza y cine

estar solo es como viajar en avión:
la tristeza se parece a flotar en aire, sin ver el camino
con frío y envenenado
No me gustan los aviones
me bajo de mi tristeza
Aunque no lo crean, la tristeza es una causa importante de muerte, mucha gente muere de tristeza, solo que no se dice, porque siempre hay una causa “real” que la opaca. Es el dilema de la escena final de King Kong, versión Peter Jackson: ¿Quién mato al monstruo? No fueron las balas, ni en la vida ni en el cine son jamás las balas….
El cine esta repleto de historias tristes, actores tristes y films tristes, heroínas de ficción que son actrices de la vida real tristes. Mujeres bellas que han muerto de tristeza –o al menos lo suponemos- Marilyn Monroe: bella, triste y solitaria al final de su vida, Judy Garland vacía y triste hasta su suicidio en 1969, Pina Pellicer, la actriz mexicana que fue dirigida por Marlon Brandon en One-Eyed Jacks en 1961, también murió por mano propia de tristeza justo a mi edad: a los 30 años. Mejor no sigo contando, el cine y la tristeza se llevan bien, pero en la vida la tristeza duele y la mayoría decimos como en las canciones pop: Plis Don’t hurt me again.
 ¿Qué puede ser más triste que amar a alguien y no poder verlo? les aseguro que nada.
Two Lovers (2008), llega tarde a la cartelera nacional, pero antes de estarlo, un año o más atrás se podía leer en la prensa: Joaquín Phoenix deja el cine por la música, declina de la actuación, quiere ser cantante. No se cuán acertada sea esta decisión para alguien tan brillante actuando como lo es Phoenix, quien protagoniza esta cinta junto a Gwyneth Paltrow una actriz con aire melancólico, pero al parecer no triste.
En Two Lovers, la que Phoenix dijo seria su última película (pero no le creo o mejor dicho no quiero creerle) interpreta a un hombre “perdido” que no haya que hacer con su existencia. Leonard Kraditor toma fotos pero no es un fotógrafo, no tiene una carrera. Acaba de salir de un intento de suicidio, tras el abandono de su novia siente que su vida es bastante más miserable de lo que jamás se imagino.
Michelle Rausch (Gwyneth Paltrow) ha llevado una vida tan “a la deriva” como la de Leonard, cargando una serie de relaciones románticas desafortunadas. Dejándose llevar por su patrón de conducta destructivo, Leonard se enamora de Michelle, pero a la vez tiene la suerte (o mala suerte) de toparse con Sandra Cohen (Vinessa Shaw), la hija de un buen amigo de su familia. Allí se conforma un triangulo amoroso bastante triste.
No se si será adelantar el final el decir que Two Lovers, es la clásica película sobre amores imposibles, que entretiene (y deprime) porque no es “una comedia romántica“o una “historia de amor“. Es la radiografía de algunos días en la vida de estos personajes, que tratan de encontrar dentro de la pesadumbre un poco de belleza. Su director, James Gray filma en los mismos colores, y parecida fotografía que en otra de sus películas We Own the Night, todo un acierto.
Viendo esta cinta corroborarás que el cine y la tristeza se llevan bien, al terminar el film quedas con la sensación de haber asistido a un cuento muy triste, aunque reflexivo.