Revista Ciencia

Un colimbo grande... y otro... y otro

Por Ernesto Villodas
UN COLIMBO GRANDE... Y OTRO... Y OTRO  Colimbo grande (Gavia immer)  Está siendo un invierno muy suave este de 2014, por lo menos hasta el momento, e incluso se están viendo algunas estivales como golondrinas o tarabillas norteñas por el norte peninsular. También se nota que los clásicos invernantes son bastante más raros de ver que otros años por estas fechas. Los colimbos grandes suelen verse en solitario...
UN COLIMBO GRANDE... Y OTRO... Y OTRO  Colimbo grande (Gavia immer)  ... en alguna ocasión por parejas.
UN COLIMBO GRANDE... Y OTRO... Y OTRO   Colimbo grande (Gavia immer)  Ya es más raro ver un trío, la máxima concentración de colimbos grandes que yo recordaba hasta la fecha en mis observaciones.
UN COLIMBO GRANDE... Y OTRO... Y OTRO   Colimbo grande (Gavia immer)  Cuatro se me antoja un número extraordinario para esta especie que, al contrario por ejemplo de su primo el colimbo chico que gusta de unirse con sus congéneres en la playa de Laredo en grupos en ocasiones de más de 20 ejemplares, como decía, el colimbo grande parece una especie básicamente solitaria cuando nos visita en las Marismas de Santoña.
UN COLIMBO GRANDE... Y OTRO... Y OTRO  Colimbo grande (Gavia immer) Así que os podéis imaginar mi asombro cuando me encontré con 5 ejemplares pescando al unísono, cual cormoranes grandes, en la canal de Ano, ¡increíble!. ¡Parecía una broma!

Volver a la Portada de Logo Paperblog