Un fútbol inverosímil

-Los fuegos artificiales reventaron el cielo, los hinchas las tribunas, los ídolos la pantalla gigante y aún así la despedida de Martín Palermo pareció incompleta. Ni haber metido tres goles, ni el arco del triunfo, ni el telón más grande de América podrían haber expresado el cariño del público general al Optimista del Gol o realizar un adiós acorde a su trayectoria. Todas las despedidas dejan un vacío que molesta, y esta no fue la excepción.

-Más allá que el diario deportivo más importante del país no le haya dado el espacio merecido, el título de Vélez fue un gran hito del año. El fútbol, tantas veces injusto, le dio el mejor premio al que más méritos había demostrado en este semestre. Representa un reconocimiento para el Fortín, pero una invitación para todos los demás a animarse a jugar, ser protagonistas y desde la posesión de la pelota pensar los partidos. Demostró que el buen juego no es vender humo.

-Si hay algo que colaboró a la poca difusión del gran título fue el contexto. Vélez es un club chico en hinchas y su campeonato apareció de casualidad en la tarde noche del domingo. Dice de casualidad porque nadie esperaba que Lanús perdiera ante Argentinos. No sólo se consumó el título cuatro horas después de ganarle a Huracán, sino que dicho partido fue disputado sin hinchas velezan por disturbios de los locales. Insólito..

-Lanús también intentó pregonar el buen juego por momentos. Tuvo muy buenos triunfos ante Tigre, Huracán y hasta al propio Vélez. Cuenta con grandes jugadores, pero es un equipo en formación, algo inmaduro a veces. Las incorporaciones de Valeri, Araujo, Camoranesi y Carranza fueron acertadas. Por otro lado, también sirvieron para desmitificar lo de club modelo que se nutre únicamente de jugadores de la cantera.

-Salvo las mencionadas excepciones, el fútbol argentino está siendo muy malo. Como dijo Daniel Arcucci hace un tiempo en su Twitter (@darcucci), no hay que confundir competividad con calidad. Son varios los equipos que pelean y el torneo es emocionante, pero el nivel de algunos equipos es paupérrimo. Olimpo, Tigre, River, Newell´s, Banfield, Gimnasia y San Lorenzo son algunos de los peores exponentes. Por otra parte, salvo los primeros cuatro de la tabla de posiciones, probablemente ninguno más podría decir que tuvo un semestre auspicioso.

-En el tan temido último puesto por disputar la Promoción, parece que los que se salvarán serán los menos peores. El partido de River vs. Lanús con el Millonario al borde del abismo, casi no tiene relevancia en los números del equipo de Jota Jota. Si juega la Promoción o no dependerá del partido de Quilmes-Olimpo. Si el aurinegro gana, River puede aspirar a un desempate mano a mano. Si el Cervecero gana o empatan, River se salva. Sí, River puede darse el lujo de no ganar por sexta vez consecutiva y salvarse. Porque si se salva River será más por méritos ajenos que propios.