Una alcaldesa socialista iza la bandera republicana en un ayuntamiento salmantino

No me ofende la bandera republicana ni ninguna otra; no me identifico con símbolos de ninguna clase, y este manido tema me parece un atavismo. Las dos varas de medir a las que nos referimos un montón de veces en este espacio, vuelve a producirse con una izquierda desnortada como protagonista. ¿Qué hubiese sucedido si un alcalde popular izase la enseña franquista en el Ayuntamiento que rige?. Las comparaciones de su partido con la ultraderecha serían la menos grave de las acusaciones, mientras que lucir el símbolo de una República que carga con una historia repleta de desmanes, acaba por ser signo de progresismo. La bandera fue retirada por la Guardia Civil; el detalle carece de importancia. La Benemérita, militarizada y constituyendo la fuerza de orden público con menores emolumentos, podrá ser calificada de fascista por hacer cumplir la ley, en otro ejercicio modélico de entender la democracia.