Hay casas de pueblo que nos dejan con la boca abierta, esta de estilo mediterráneo con toques nórdicos y minimalistas es una de ellas.
Es una de las viviendas más espectaculares que hemos visto en los últimos meses en nuestro país, en realidad llamarla casa del pueblo se queda cortísimo, porque se trata de una mansión de 510 m² construida en 1896 y reformada sin escatimar en nada.
Lo primero que cabe destacar es el entorno, maravilloso, en el idílico pueblo de Sóller junto a las bonitas playas baleares y la sierra de la Tramontana, si no habéis estado nunca, os recomendamos pasar unos días allí porque es un enclave precioso, que jamás olvidaréis.
Por otro lado, destacamos la arquitectura de la casa, un diseño de arquitectos parisinos de finales del siglo XIX en el que se plasmó el encanto francés, como los techos altos y detalles hechos a mano.
La propiedad ha estado en manos de la misma familia que la construyó y la cuidó incansablemente durante 120 años hasta su reforma más reciente.
En cuanto veáis las fotos apreciaréis las decenas de magníficos detalles: vigas y puertas originales, suelos cuidadosamente restaurados, las vistas, los exteriores, la amplitud de dormitorios y cuartos de baño, el lujo controlado... y todo respetando profundamente el entorno.
Nos fascina y enorgullece que construcciones así las encontremos en nuestro país ¿no os parece?
Vía: Bjurfors
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