Revista Opinión

Una izquierda digna de tal nombre

Publicado el 01 febrero 2015 por Jangas

“Para serlo hay que estudiar, hay que fajarse y hay que demostrar en la práctica lo que se quiere ser. Ni la clase obrera va a ir al Paraíso por el lugar en que ha nacido o por la fábrica en que trabaja, ni los comunistas van a ser los más resueltos y los más conscientes entre los trabajadores y quienes están con los trabajadores por el mero hecho de proclamarlo.”
Marx

Izquierda Unida es una herramienta ideologizada, de Izquierdas, su propio nombre lo indica, pero no puede haber una IU propia, incapaz de regenerarse, que no deje pasar a nuevas ideas ni a nuevas políticas, que se aferre a la institución como medio exclusivo para la transformación. No puede haber una IU acobardada encerrándose en su propia identidad e incapaz de representar a las mayorías sociales recortadas por la crisis-estafa y por las decisiones de las políticas del austericidio. O sumisa a la posibilidad de gobernar o no con el PSOE.

Hemos de decidir qué IU construimos. ¿Nos mezclamos con otros movimientos políticos y sociales y nos contaminamos, trabajamos junto con las plataformas y mareas, con los movimientos sociales como hemos hecho en Palencia y se ha hecho en muchos otros sitios? ¿O nos encerramos en nosotras y nosotros mismos?

Muchas veces cuando no nos mezclamos es por miedo. Nuestro discurso político tiene que ser capaz de crear hegemonía cultural, no porque sea el discurso de IU sino porque sea el discurso que asuma la mayoría de gente, no por quién lo plantea sino por los argumentos. Y si no es nuestro discurso que sea el discurso de otras personas asumido por nosotras y nosotros. La humildad es importante para trabajar con otros colectivos.

Es la dinámica del movimiento político y social que representamos, que está en el tuétano de la Izquierda Unida de hace casi treinta años. Un movimiento político y social que utiliza las instituciones para ponerlas al servicio de la ciudadanía, que busca en ellas altavoces para que las personas que están pasándolo mal o que están sufriendo o las que luchan contra la injusticia la puedan transmitir a la sociedad de forma que tengan mayor impacto. En la palabra estas perdido, porque los reglamentos les favorecen, los números están de su parte, en todo caso habrá que buscar resquicios que permitan buscar las cosquillas a la Institución. Pero solo para decirles que hay grietas que permiten tirar el muro.

Hace unos días José Sarrión ponía el ejemplo de los Centros de Internamientos de Extranjeros y de como Javi Couso había utilizado su cargo de Eurodiputado para conseguir denunciar la situación en la que los inmigrantes están recluidos en esos centros, que son peores que las cárceles. Quienes somos cristianos nos suena eso de: “Fui extranjero y me acogisteis, tuve hambre y me disteis de comer”. Pues la política de criminalización que se realiza desde hace años no está solucionando los problemas de las personas que se ven forzadas a salir de sus países.

No hay como que tengan que emigrar miles y miles de españoles y de Castellano y leoneses para que tengamos más empatía y lo comprendamos mejor. La despoblación ha sido el mal endémico de nuestra provincia, de nuestra ciudad y de nuestra comunidad. Nuestros pueblos se han ido despoblando de forma alarmante mientras nadie hacía nada para evitarlo. Ahora nuestra ciudad, que acoge a gente de la provincia que se viene a vivir aquí, también pierde población. No podemos permitir que quienes gobiernan se resignen, no es tolerable que se hable de bajas tasas de paro, que por otro lado empiezan a ser preocupantes, cuando nuestro problema es que la juventud tiene que emigrar hacia otras ciudades o países. No es posible que eso no se considere una emergencia nacional, que nuestros gobernantes sonrían porque al irse jóvenes maquillan las cifras del paro,…

Vamos a tener que defender las políticas de cooperación en nuestra ciudad, en nuestra comunidad y en nuestro estado, no con criterios de justicia y de solidaridad sino porque en breve seremos objetivo de la cooperación de otros países.

Las cifras de la pobreza energética son alarmantes, las de pobreza infantil, que se reflejan en la malnutrición, también. Todos los índices de precarización del empleo y del trabajo son indignos del ser humano, hace poco salía la cifra de que el 30% de los trabajadores en Palencia cobraba menos de 650%. Este es la ciudad y provincia, el país de miseria que están construyendo. Nosotros y nosotras no queremos ser cómplices de esto.

La IU pura o la que se contamina con los movimientos sociales, la que se involucra en los procesos ciudadanos para sumar o la que se encierra en la defensa de sus propias siglas. La que parte de la soberbia de la militancia o la que pone la militancia a disposición de la ciudadanía y del trabajo a realizar con humildad, la que ha compartido con otras u otros la lucha en la calle como iguales, desde donde se han generado los simpatizantes, esa gente que no se ha afiliado pero que ha estructurado la lucha entorno al Parque Ribera Sur para que siga siendo parque, que ha estado en las manifestaciones y en todos los procesos iniciados durante esta legislatura, la gente de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca(la PAH, como dice Alberto Garzón, opera como intelectual colectivo en sentido gramsciano) que ha sabido estructurar la lucha a favor de la vivienda como derecho fundamental en nuestra ciudad, una lucha basada en la socialización de la problemática, en colectivizar ir a preguntar al banco, en una asesoría jurídica de unos procesos montados en contra de la ciudadanía.

No hay diferencias entre los militantes de IU, militando en múltiples movimientos, y los voluntarios o los afectados por la Hipoteca. Sí hay un proceso de aprendizaje de cómo funcionan los resortes del sistema, de cómo paralizar una problemática, de cómo participar en un pleno municipal, de cómo convocar una concentración, entregar unos papeles en un banco concreto, … Como convertir un conflicto político, mediante una estrategia, en discurso de ideas para conocer quiénes son los responsables políticos de que esta problemática se dé.

No hay diferencias entre los militantes de IU y la gente de la plataforma Sanidad Universal, ni con la gente de la Plataforma por una educación pública laica y gratuita, ni con la Plataforma por los derechos de las mujeres, ni la Plataforma por una solución digna a los Tres pasos y no hay diferencia porque de una u otra manera formamos parte de las mismas luchas y estos procesos han generado afectividades, luchas y manifestaciones compartidas, concentraciones, protestas múltiples.

Mientras machaconamente nos repiten TINA, No hay alternativa. Los altavoces del sistema no callan. Pero a la par disparan con dardos envenenados contra aquellos que pueden ser alternativa, llámese Syriza, Podemos, IU o como se llame en el futuro cuando se realice el proceso de convergencia.

La alternativa a la corrupción es la decencia, es la dignidad, la poliética de la que hablaba Paco Fernández Buey, una política que esté enlazada con la ética y que esté retroalimentándose.

Hay personas que creen que este proceso de confluencia no se van a dar o que no se van a realizar de manera adecuada. No podemos permitirnos que en el actual momento de excepcionalidad social, los procesos fracasen por cuestiones personales, porque no quiero que esté IU o porque no quiero que esté Podemos o cualquier otro movimiento social, o fulanito, o menganito. Tenemos que remar en la misma dirección para que el proceso pueda salir adelante y disminuir los recelos que puedan haber en cualquier bando. Y eliminar los intereses personales y poner por delante las necesidades ciudadanas y el proceso político necesario.

Este es el otro motivo por el que creo que es necesario recuperar la ilusión, no puede ser que haya personas que tengan la obligación de militar y lo hagan de manera desilusionada y desilusionante. Los procesos políticos o se cree en ellos o no se cree. O se ven y se apuesta firmemente porque salgan adelante puesto que son lo más positivo o dejamos que el proceso nos arrastre, lo que no podemos hacer y permítanme una crítica a IU CM es aferrarnos a IU como si fuera solo de unos pocos, cuando los otros han demostrado que representan tanto o más a IU. Algo se ha hecho y se sigue haciendo mal en Madrid cuando hay personas muy válidas que están dejando la organización y otros frotándose las manos con los abandonos como si hubieran conseguido su objetivo.(De una IU pequeñita y manejable.)

Saco a colación el tema de la confluencia porque en política las cosas no caen de la nada, hay que luchar para que sean posible, hay que apostar por sacar adelante prioridades y aparcar otras que sean secundarias. Sin intermediarios, de tú a tú. No se puede hacer todo y es mejor no abarcar demasiado sino queremos que todo se vaya al garete.


Volver a la Portada de Logo Paperblog

Revistas