Una pequeña (pero necesaria) reflexión.

¿Qué pasaría si … ?

Eso es algo que muchas veces nos preguntamos cuando ocurre algo. A todos nos pasa.

Y con lo que ha pasado en Niza a mi me surge una duda.

Y es … ¿Qué sentirían los franceses si un gobierno extranjero pagase una generosa pensión a Mohamed Lahouaiej Bouhlel (en el caso de que hubiese sobrevivido a su criminal ataque terrorista en Niza y estuviera encarcelado en una prisión francesa), o a su familia?

¿Que sentirían los franceses si un gobierno extranjero nominara con su nombre calles, plazas, colegios? ¿Si se erigieran monumentos en su honor?

¿Que sentirían los franceses si una legión de ONG´s, pretendidamente solidarias, y la mayoría de los medios hablasen de “ejecución extrajudicial” por la acción de los policías que acabaron con la vida de Mohamed Lahouaiej Bouhlel  (al que, presumo, en ningún momento le leyeron sus derechos)?

¿Qué sentirían los franceses si un ejercito de “progres de salón” se dedicaran a justificar el atroz atentado terrorista con la intervención francesa en Siria? ¿O en Iraq? O … ¿Con la situación de las minorías magrebies en Francia?

Es fácil. sentirían INDIGNACION.

La misma indignación que todos los israelies, y que todos aquellos que defendemos valores como la democracia sentimos cuando una niña israeli de 13 años es asesinada apuñaladas por un terrorista palestino mientras dormía en su cama mientras una multitud lo justifica con “argumentos” tales como la “ocupacion”, el “muro”, los “check point” y mientras una entidad extranjera subvenciona a los terroristas que asesinan israelies con generosas pensiones y el presidente de esa entidad le pone el nombre de terroristas palestinos a calles y plazas y glorifica, con absoluto desprecio a las victimas inocentes, a cualquier miserable con tal de que haya asesinado o herido israelies.