Una teoría atómica acerca del tamaño de los negocios

Lo bueno, por decirlo de alguna manera, de la tabla periódica es que cada átomo es una cosa u otra. No hay ningún elemento estable que sea un poco de oxígeno y un poco de nitrógeno. Si los hubiera, entonces tendríamos millones de elementos en vez de ciento y pico.

Esto es así (más o menos) porque los electrones están aquí o allí. La distribución de las partículas subatómicas a nivel cuántico es lo que nos asegura que no existan estos híbridos ráros.

Pero bueno, me interesa que sigáis leyendo, así que mejor dejar de divagar a estos niveles, y llevarlo todo al nivel de la gestión de la empresa.

Los negocios siguen modelos similares a los de los elementos de la tabla periódica. La pequeña tienda de papá y mamá tiene el tamaño justo para papá y mamá. El alquiler del local es lo sufientemente bajo como para que lo puedan pagar. Es estable. No pueden permitirse un director financiero con un sueldo de 200.000 € al año. El negocio perdería su estabilidad.

Esto tal vez suene muy básico, pero las cosas son así: los negocios que existen, existen porque el mercado les permite funcionar con el tamaño adecuado.

El nivel siguiente al negocio de papá y mamá es diferente. Muebles diferentes, alquileres diferentes, nóminas diferentes. No es un poco más grande. Es un nivel cuántico diferente. Y luego viene la cadena, el negocio con 40 establecimientos y directores regionales y anuncios en la prensa regional. Estas cosas van juntas de manera natural, la escala es la correcta.

Darle el tamaño adecuado a tu negocio es una de las decisiones más importantes que tienes que tomar. Solo por el hecho de que te vaya bien a un determinado nivel no hay que dar por hecho que con un poco más de esfuerzo y un poco más de inversión pasarás mágicamente al siguiente nivel. Probablemente no será así.

¿Quieres pasar de ser autónomo a tener una empresa que venda tu producto a nivel nacional? La lista de requisitos para hacer bien una cosa y la otra es totalmente distinta.

Y la verdad es que esto es bueno. Es bueno porque el asignar el tamaño adecuado a tu negocio te permite tener beneficios y calidad de vida a la vez. Entre un negocio de un tamaño o de otro hay un abismo y ahí es donde la gente se cae. En esos abismos que hay entre los distintos tipos de negocios.

Uno de los efectos adversos de la revolución de internet es que han aparecido algunos nuevos tamaños de negocio estable. Una tienda online como Groupon puede tener unos ingresos realmente grandes con un número de empleados realmente pequeño. Un escritor puede llegar a más gente y generar más impactos con internet de lo que era tan siquiera imaginable hace solo 12 años.

Pero estos nuevos tamaños no quieren decir que las reglas de la escala cuántica hayan desaparecido. El escritor que antes publicaba él mismo sus obras, tal vez pueda tener ahora media docena de empleados, pero no es humanamente posible que pase a tener 60 sin que algo más cambie. Hay mucha gente que ha empezado ideas de negocio que tenían muy buena pinta, pero no fueron capaces de encontrar la ecala adecuada. Al contratar más empleados los ingresos apenas aumentaban, y menos empleados hacían que el negocio no fuera viable. Esto es así simplemente porque por el mero hecho de que una idea sea buena, no quiere decir que haya una escala adecuada en el mercado que haga posible que esa idea funcione.

Si tienes problemas con tu negocio, piensa en tu escala. Cuando seas demasiado grande o demasiado pequeño para los ingresos o el impacto que buscas con tu negocio, lo notarás. Eso te pasará factura. Pega un salto y dirígete hacia tu tamaño de negocio adecuado.

Recuerda que Cuestión de Negocios es posible gracias a la publicidad. Si los anuncios te parecen interesantes, puedes hacer clic sobre ellos.