Uno de los nuestros en el Madison (Parte II)

Hace dos meses comencé la serie de tres capítulos donde iría analizando la estancia de Sergio Rodríguez en los New York Knicks con un resumen de lo acontecido hasta entonces en su carrera y con vistas a su futuro más inmediato. La segunda entrega del serial coincide con el primer análisis de los españoles NBA y un vistazo a la estancia de Sergio en su etapa en los Knicks.
Si se debe poner un adjetivo a la aportación de Sergio Rodríguez en los Knicks es "irregularidad", una irregularidad más bien propiciada por factores externos al "Chacho". Sergio ha rendido a un nivel aceptable en su estancia en los Knicks, promediando en 27 partidos, 8 como titular, casi 20 minutos, 7'4 puntos, 3'4 asistencias y más de un 49% de aciertos en tiros. A priori no han sido números estratosféricos, pero extrapolándolos a 40 minutos de juego nos quedan 15 puntos y 7 asistencias. Aceptable cuanto menos.
Como no me gusta demonizar a los entrenadores de jugadores españoles, no voy a criticar el hecho de que D'Antoni haya dejado a Sergio sin jugar en un par de choques y en menos de 10 minutos en otros cuatro, ya que también le ha confiado más de 25 minutos en cuatro. El final de temporada de los Knicks ya sabíamos que no sería en busca de resultados ya dando por tirada la temporada hace 2 años, sino más bien una especie de pretemporada donde ir probando con qué jugadores deberían quedarse de cara a la próxima campaña, cuando pretenden fichar al menos a dos grandes Agentes Libres. De esta forma se comprende que tanto Sergio como McGrady, House o Walker hayan jugado en torno a 20-30 minutos de media y que un jugador como Douglas pasara del ostracismo a jugar más de 30 minutos durante Marzo y Abril. Probaturas.
Lo que pienso respecto a dichas probaturas de D'Antoni es que la decisión sobre Sergio estaba tomada desde hace tiempo: a Sergio le ofrecerán quedarse por la Qualifyng Offer (2'8 millones de dólares la próxima temporada). Y lo harán por dos simples razones: no habrán muchos bases mejores y que se adapten al estilo D'Antoni al menos para el puesto de suplente y que sean tan baratos y de esta manera acometer algún gran fichaje. Lo que no me queda tan claro desde hace un par de meses es que Sergio vaya a aceptar esta oferta.
Sergio Rodríguez no debe en ningún momento sentirse decepcionado o fracasado por su estancia NBA. Es cierto que siempre hemos esperado más de él sobretodo tras conocer que jugaría a las órdendes de Westphal y D'Antoni, pero las circustancias ajenas tampoco ha ayudado. La explosión de Evans y el rendimiento de Udrih primero y la pretemporada de Marzo y Abril de los Knicks después no nos ha dejado ver hasta qué punto Sergio puede rendir en la Liga. Cuando el jugador canario tenga decidido su futuro, allá más o menos por Junio o Julio, escribiré el último capítulo de la trilogía de Sergio en Nueva York. Esperemos que con buenas noticias para él, que para mí sería continuar en una franquicia histórica de la ciudad más importante del Mundo y que se prevée tenga un futuro a corto plazo brillante.