Vacaciones y una maleta cargada de buenos deseos

Creo que hay dos veces al año, separadas más o menos por seis meses, en las que los buenos propósitos se amontonan en nuestra mente. Año nuevo y durante las vacaciones estivales.

Quizá el primer propósito se plantee al comenzar a preparar la maleta… Recordamos que el pasado verano utilizamos la mitad de ropa de la que nos llevamos. Por ello nos proponemos racionalizar mejor ropa y complementos. La intención es buena pero poco a poco la maleta se va llenando y seguramente el primer propósito lo volvamos a reservar para el próximo verano…

Personalmente apenas utilizo collares y pulseras durante el invierno, me las reservo para el verano, y me cuesta mucho seleccionar lo adecuado.

Pero a parte del propósito de meter menos cosas en la maleta, que es el más frívolo de todos, hay otros buenos deseos que nos gustaría cumplir en vacaciones. Hay quienes se proponen llevar una vida sana y aprovechar para por ejemplo dejar de fumar. Mi gran deseo es poder tener tiempo para leer, luego los días se van llenando de actividades, más aún en familias con niños como la mía, pero siempre viajo con varios libros que me gustaría leer, si consigo hacerme con la mitad de ellos me sentiré satisfecha! Para este verano he seleccionado, Isabel de Solís, Soraya, un cuento de amor en la Alhambra, de Brígida Gallego Coín, que por cierto, firmará el libro en la feria del libro de Marbella el día 26 de agosto. El Hijo de la filoxera, Cipreses bajo la Luna, Cuando la tierra se vuelve plata de Alison Wong, La Senda Oscura de Asa Larsson y El Jardín Olvidado. Os iré contando impresiones…

Otros buenos propósitos son también hacer un poco de turismo, yo empecé parando en Palencia camino de Santander. Di junto a mi hijo Lucas un paseo por esta bellísima ciudad castellana, y comimos en la Plaza Mayor. Una parada perfecta por una ciudad que merece la pena. Ahora me gustaría también visitar museos de la zona, incluso viajar un día a Bilbao donde en el Museo de Bellas Artes o en el Guggenhein siempre hay buenas e interesantes exposiciones. (En el Bellas Artes tenemos la expo Oro Sagrado, Arte precolombino y la Belle Société de Magritte.) Otro propósito por cumplir.

El verano es un tiempo perfecto para comer sano, la fruta es ahora variada y abundante y luego lo excesos se pagan, mejor prevenir y aprovechar esta época para alimentarse bien y hacer un esfuerzo por moderar esos aperitivos que nos tientan cada día. En cualquier caso siempre se puede compensar el exceso en la alimentación con el deporte. Desde paseos por la playa o el campo, footing o bicicleta. Deportes que no necesitan grandes inversiones ni mucho equipamiento, deportes para realizar al aire libre, disfrutando de la naturaleza y del buen tiempo.

Cada cual tendrá sus propios propósitos, siempre serán buenos y es importante tratar de cumplirlos. Todo cabe finalmente en la maleta, ahora lo importante es utilizarlo, realizarlo y disfrutarlo.

Os deseo unas felices vacaciones y que vuestros sueños y deseos se hagan realidad!

Pero siempre, las bicicletas son para el verano!

Felices vacaciones!