De acuerdo al último estudio del Colegio Dartmouth, en Estados Unidos, la visión de terceras personas fumando activa áreas del cerebro humano directamente relacionadas con el deseo de fumar.
La investigación, que se ha publicado en la publicación “The Journal of Neuroscience”, ha sido llevada a cabo mediante una muestra de 34 personas, la mitad de las cuales se declararon fumadoras activas, que fueron sometidas a un fragmento de película.
Más concretamente, el “film” elegido para tal ocasión se trató de “Los impostores”, película donde se presentan varias escenas de tabaquismo, y que, tras sólo 30 minutos de visionado, ya permitió a los estudiosos sacar conclusiones claves en la relación “observación-deseo de fumar”.
La muestra del estudio, a la vez que se deleitaba con la película, pasaba por imágenes de resonancia magnética, hecho que permitió a los científicos observar las respuestas cerebrales de los pacientes. Se comprobó así que, durante una escena de tabaquismo en la pantalla, se producía una activación del llamado surco interparietal, una parte del lóbulo parietal encargada de la percepción y la coordinación.
Estos resultados arrojan a la luz datos que ya se sospechaban en la práctica (años atrás se habían realizado estudios similares), pero que hasta ahora no se habían verificado de forma tan clara.
De acuerdo a Dylan Wagner, encargado principal de la investigación, estos datos “podrían servir en la obtención de recursos adicionales para luchar contra el tabaquismo”. Incluso advierte, no sin antes dejar claro que aún se necesitan más estudios para comprobarlo, que el hecho de ver fumar a terceros también podría incidir en la recaída de ex-fumadores.
A cualquier fumador que quiera dejar su vicio, se le recomienda alejarse del tabaco lo máximo posible y no frecuentar ambientes donde se respire o se promueva su uso, pero… ¿estará ahora pendiente del argumento de la película la próxima vez que vaya al cine?
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