Verbo (Eduardo Chapero-Jackson, 2.011)

Ficha:
Título Original: Verbo.
Director: Eduardo Chapero-Jackson.
Guionista: Eduardo Chapero-Jackson.
Intérpretes: Alba García, Miguel Ángel Silvestre, Najwa Nimri, Verónica Echegui, Macarena Gómez, Manolo Solo, Adam Jezierski, Víctor Clavijo, Nasser Saleh Ibrihim, Michelle Asante, Peter Peralta, Álvaro Cañete, Miriam Martín, Djédjé Apali, Sergio Villalba, Fernando Soto.
Productor: Enrique López-Lavigne, Belén Atienza, Álvaro Augustin.
Fotografía: Juan Carlos Gómez.
Música: Pascal Gaigne, Nach.
Montaje: Elena Ruiz.
País: España.
Lugares de rodaje: Madrid (España).
Año: 2.011.
Duración: 87 minutos.
Edad: No recomendada para menores de 12 años.
Género: Aventuras, Drama, Fantástica.
Distribuidora: eOne Films Spain (Aurum Producciones, S. A.)
Estreno: 04-11-2.011.
WEB Oficial: Web Oficial de la película en España (Telecinco).
Espectadores: 30.110.
Recaudación: 186.531,58 €.
Calificación: 5,660.
Sinopsis:
"Verbo" cuenta la historia de Sara, una chica de 15 años con un sexto sentido. Una joven y tímida heroína del siglo XXI que empieza a intuir que en el mundo tiene que existir algo más que lo que ven nuestros ojos, algo escondido que empieza a obsesionarle. Guiada por su instinto, comienza a encontrar en su gris existencia una serie de inquietantes mensajes y pistas que le empujan a entrar en una nueva dimensión, peligrosa y terrorífica, en la que deberá iniciar un viaje para salvar su vida. En el transcurso de este devenir perturbador pero lleno de aventuras, Sara encontrará un nuevo reto: el modo de cambiar el mundo.
Comentario:
Seguramente uno de los cortometrajistas más prometedores del panorama cinematográfico español, Eduardo Chapero-Jackson por fin ha dado el salto al largo. Lo hace con una de las películas mas atípicas y originales del cine reciente, "Verbo". Sara una adolescente de extrarradio, está perdida en el mundo. Su encuentro con el enigmático Líriko la llevará a un lugar secreto, donde le espera una gran aventura. Una película influida por el hip hop, el manga y los videojuegos, que cuenta en su reparto con Miguel Ángel Silvestre.
Crítica:
11-11-2.011 – JOSU EGUREN
La zona OFF
Puedo, quiero, imaginar las ideas que pretendía dictar Eduardo Chapero-Jackson con su primer largo, pero la realidad es testaruda y no pocas veces los sueños bienintencionados de la razón producen verbos monstruosos. "Verbo", que se promociona con una enfática llamada de atención sobre su gélida y cuidada factura estética, es en realidad una película hablada en la que las rimas on/off estorban la lectura de un imaginario visual en el que la efectividad de una puesta en escena minimal se quiebra bajo el peso de los hipérbatos.
Son evidentes, no se si proporcionados, los métodos que pone en juego Chapero-Jackson para reanimar las desorientadas consciencias adolescentes, pero ocurre que a menudo se precipita en el desconcierto absoluto (sospecho que en la jerga nini "Verbo" podría definirse como un soberano coñazo) porque dialoga no tanto con los que deberían ser sus espectadores, sino con el narcisista que anida en su interior. Chapero-Jackson no ha dado el paso entre corto y largometraje, ni siquiera ha arriesgado hasta el límite proponiendo modelos de narratividad no lineal que deberían ser perfectamente asumibles para un público que se ha criado por y para los videojuegos (la sombra de 'Assasin's Creed' es alargada).
Donde sí hubiese tenido sentido radicalizar el concepto del overlapping y la multireferencialidad cervantinas (las llamadas, impudentes, al Quijote son constantes), el director de la célebre trilogía corta "A contraluz" se marca salidas de tono tan naifs como un carrera sobre los raíles de unos mástiles del 'Guitar Hero' que devienen en cadenas biogenéticas, y todo esto, además, cuando los personajes han abandonado su forma corpórea para transformarse en avatares manga. La originalidad está reservada para unos pocos y no basta con plantear una 'batalla de gallos' en el limbo del ridículo para disimular que estás fusilando a diestro y siniestro ahora de "Dentro del laberinto", después de "Ghost in the Shell", más tarde de "Matrix". "Verbo" quiere ser ella misma, pero en el proceso se convierte en nada.