Visto en pelis: Inferno

[TRANQUILIDAD: ESTE ARTÍCULO NO CONTIENE SPOILERS] Tras haber visto hace años las dos películas anteriores (El código Da Vinci y Ángeles y demonios), por fin he conseguido ver la tercera película de esta saga de pelis basadas en tres de las exitosas novelas de Dan Brown dedicadas al personaje de Robert Langdon. Esta tercera película, se titula de la misma manera que el libro en el que se basa: Inferno.

La cuestión de la superpoblación mundial es el tema de esta película. Un millonario excéntrico está dispuesto a dar solución a este problema de manera radical, lo que podría generar un problema de orden mundial.

El profesor Robert Langdon será una pieza fundamental para la resolución de este misterio, ya que la Historia y el poeta Dante Alighieri serán los dos principales ingredientes en los que se basa el misterio.

Por el medio, también existe una historia de confianzas, amores, convicciones, traiciones y conspiraciones, que determinan giros inesperados en la trama, y que son muy interesantes en un sentido psicológico, aportando una gran dosis de intriga a la película a medida que se desarrollan los acontecimientos.

Como casi siempre, Tom Hanks se luce en su papel protagonista, le viene como anillo al dedo interpretar a Robert Langdon, aunque tampoco se debe olvidar el destacado papel que desempeña la actriz Felicity Jones en esta película. Por otro lado, el uso de diferentes idiomas a lo largo de la película, le da un toque multicultural, algo que le viene muy bien a la película, debido al, a veces, excesivo protagonismo de la cultura europea.

En definitiva, estamos ante una película apta para toda la familia, que entretiene, mantiene la intriga hasta casi el final, tiene ciertos toques de humor, y que fotograma a fotograma, parece que se recorren algunas importantes ciudades europeas y algunos de sus monumentos más importantes casi como si estuviésemos físicamente presentes allí, lo cual nos permite conocer estos lugares (si es que nunca estuvimos allí, claro). Desde luego, es una película recomendable al 100%.

Simón de Eiré