Alguna vez he escrito sobre cómo los partidos políticos en España y los medios de comunicación mediante sus editoriales, tienen perfectamente decidida su posición sobre temas que afectan a grupos muy concretos de la población y sin embargo no desarrollan ni saben muy bien cómo lidiar los grandes temas que afectan a la mayoría de la población. Un somero vistazo a los principales problemas de los españoles de las encuestas del CIS nos informan de que el paro y la economía son identificados como los mayores problemas de España pero no hay un debate serio sobre esto. Sin embargo, del IBI de la Iglesia, del refugiado saharaui de turno y de cosas así, todo el mundo tiene su postura perfectamente clara. Vox participa de este problema. Es pronto para juzgarlos, pero es indicativo de qué análisis han realizado para dar el paso de constituirse en partido político.
De qué se habló en la presentación del partido a los medios
En la presentación del partido a los medios tomaron la palabra José Luis González Quirós, Ignacio Camuñas, Santiago Abascal, Cristina Seguí y José Antonio Ortega Lara. Por allí también andaba Iván Espinosa de los Monteros como cuota del problema que identifico bajo el nombre de Doña Pilar de Borbón. Me detengo en este señor un poco. Iván Espinosa de los Monteros es hijo de Carlos Espinosa de los Monteros y Bernaldo de Quirós que es el Alto Comisionado del Gobierno para la Marca España (chiringuito donde los haya) y IV marqués de Valtierra. Este marqués, antes de ser Alto Comisionado, logró plaza de economista del Estado en 1969, fue agregado comercial en el consulado de Chicago, fue Director Comercial y Vicepresidente del INI, presidente de Iberia y luego en el sector privado presidente de Mercedes Benz y de Daimler Chrysler. Su padre, el III marqués de Valtierra, se llamaba Francisco Javier Espinosa de los Monteros y Herreros de Tejada y fue una de las poquitas personas que compartieron vagón en Hendaya con el cuñadísimo, Paco, Von Ribbentrop y Adolfo. El padre de este, que fue el II marqués de Valtierra fue embajador de España en Berlín y el padre de éste, que fue el primer marqués de Valtierra se llamaba Carlos Espinosa de los Monteros y Sagaseta de Illúrdoz, militar de carrera que alcanzó el grado de coronel en las campañas del norte de África, luego ascendió a general de brigada, guardó el Cuarto Militar de la reina María Cristina, luego ascendió a teniente general, le concedieron el marquesado y fue agregado militar de la embajada española ante el Imperio Austro-húngaro, diputado en 1881, gobernador civil de Barcelona y Guipúzcoa y finalmente embajador en París. Como digo, empiezas a rascar un poco y esto es un no parar. Pero sería injusto catalogar a alguien por la trayectoria über-insider de su familia. No tengo motivos para pensar que no es un buen tipo. Alguna vez lo vi en intereconomía y me pareció una persona más o menos normal.
Volviendo al tema. Presentación de Vox. El profesor de filosofía y ex-miembro de la UCD y del CDS don José Luis González Quirós (67) (aquí su blog de reflexiones y comentarios cotidianos) presentó el acto en el que fue cediendo la palabra a otros ponentes. A continuación intervino Ignacio Camuñas Solís (74), diputado del 77 al 82, fundador del Partido Demócrata Popular, ministro de Relaciones con las Cortes (chiringuito) de 1977 a 1978, también fue representante de España ante la UNESCO. ¿Y de qué habló este señor? De lo que lleva meses hablando en el Foro de la Sociedad Civil. La crisis española tiene una raíz política, el estado está mal hecho, esto es un desiderátum. etc. En particular de la reforma institucional que necesita España con dos grandes puntos de actuación: acabar con la partitocracia promoviendo la democratización de los partidos (cosa que efectivamente está en la Constitución) y acabar con las comunidades autónomas que promueven la peligrosa sedición y el despilfarro.
Después habló Santiago Abascal (38), presidente de DENAES, ex-concejal en Llodio y ex-diputado en el parlamento vasco. Hijo de su padre que es dirigente del PP en Álava (ya veremos por cuánto tiempo) y nieto de su abuelo que fue alcalde de su pueblo, Amurrio, de 1963 a 1979. Hace pocos meses surgió una cierta polémica debido al desempeño de Santiago Abascal como director gerente de la Fundación para el Mecenazgo y el Patrocinio Social. Una fundación pública en la que trabaja él y un ayudante. Curiosamente, el propio Santiago Abascal está en contra de estos chiringuitos y así lo explica para su caso personal.
Dazibao en Amurrio.
Y así tres generaciones de la misma familia.
Don Santiago habló de su sonada despedida del PP tras la velada amnistía de los torturadores en el marco de la negociación del estado con ETA. Dijo que los partidos ignoran el interés nacional ya que se mueven por intereses clientelares y promueven por tanto la corrupción. Una parte de su intervención fue en mi opinión intachable: libertad individual, estado de Derecho, imperio de la ley y soberanía nacional. Promoción de un sistema educativo basado en el mérito y el esfuerzo, defensa del libre mercado (no entró en detalles) y acabar con las subvenciones a partidos, sindicatos y patronales. Bien. La otra parte de su discurso ya no me gustó tanto: cuando habla de "integrar la rica diversidad de España" y defiende que haya un único parlamento y un único gobierno en España. Y este es uno de los puntos clave en los que no coincido con este partido.- La descentralización promueve la convergencia de renta entre distintas partes de España.
- La descentralización supone más equilibrios y contrapesos que nos alejan de la perniciosa concentración de poder.
- Estoy contra los chiringuitos como el que más. Durante el zapaterismo loco fue cuando más creció la deuda de los chiringuitos públicos estatales.
- La centralización conlleva un fenómeno que se llama inflación orgánica, así que la excusa del despilfarro (que sobre todo dicen Camuñas y Quirós) a mi no me vale.
Claustro del monasterio de Samos.
Ojo, tampoco ignoro que esta reforma que defienden necesitaría de tantos apoyos que prácticamente la podemos considerar un brindis al sol para contentar a los jubilados madrileños y a la casta capitolina de Coruscant. Sepa Coruscant que el centro galáctico está lejísimos del Borde Exterior. Sepa Coruscant que hay encuestas del CIS y barómetros autonómicos que pintan a los no nacionalistas en las regiones periféricas como gente que permanentemente lidia con varias identidades y que siente a su comunidad inmediata como muy suya. Observo que este tipo de análisis no los han hecho.Continúo. Después intervino Ortega Lara (56) que es símbolo de la dignidad cívica de este país. Se quejó el burgalés de que la nación ya no tiene quien la defienda, de que el estado de Derecho se está rindiendo frente al terror y frente a viajes que no llevan a ninguna parte. Reclamó el fin de la politización de la justicia y una efectiva separación de poderes. Finalmente dedicó unas palabras para hablar de la regeneración política que necesita España y que aunque no sea en este partido, la gente debe militar en partidos que promuevan esa regeneración. El público no paró de aplaudirle.
Cristina es traductora, creo que trabajó de azafata de vuelo y debe tener unos 35 años. En política es crucial contar con personas como ella.
Por último Cristina Seguí habló de que el partido seguirá métodos de democracia interna, tendrá una financiación transparente y que de momento los cargos serán provisionales hasta el primer congreso que se hará en febrero. Las listas a las europeas se elaborarán siguiendo primarias "que no serán un simulacro", apuntó, en clara alusión a los partidos del régimen.Rueda de prensa
En la rueda de prensa contestaron sobre el aborto, la monarquía, Burgos, política fiscal y construcción europea. Aunque me puso los pelos de punta la extrema defensa de la monarquía que esgrimió Ignacio Camuñas (llegó a insinuar que el Rey debía participar en cuestiones políticas), realmente de aquí lo único que me interesaba era la política fiscal y la Unión Europea. Contener gasto público, aliviar los impuestos asfixiantes que paga la clase media y cosas del estilo. Ni una mención a la ingeniería financiera con la que los que más tienen menos pagan, ninguna mención a que los menores de 30 años ya son un grupo de población en riesgo de pobreza, ni una mención al problema de la precarización del trabajo, ni una propuesta sobre política laboral. Vale, acaban de empezar y el señor que "sabía de economía" que tenían allí fue ministro con Suárez así que poco más se les podía pedir, pero que se pongan las pilas.
Y sobre Europa dijeron que España debía aspirar a ser uno de los países decisorios en cuestiones comunitarias, apoyan una mayor integración europea pero todo quedó como muy vago y con referencias a Europa como idea mágica y lejana (cosa que también hace el resto de partidos, por cierto).
Algunas notas
- Hay un detalle que se ha pasado por alto. Vox se define directamente como derecha o centro-derecha. Esto hace que UPyD ya no pueda bailar con la ambigüedad de "no ser de izquierdas ni de derechas". En el momento en que aparece Vox, UPyD ya es públicamente y a todos los efectos una formación política de izquierdas. A muchos estas etiquetas nos dan igual pero entiendo que al electorado como masa no.
- A poco de dinero y eco mediático que consigan, el PP va a tener un problema. Ciertamente no están en posición de prometer nada a nadie pero si las presiones vienen desde las bases, una fractura en el PP yo no la descartaría (fractura no es la palabra, los votos no pertenecen a los partidos). Todos conocemos lugares en los que al PP lo sostienen chicles y alambres.
- Es necesario que en los próximos meses aparezcan con algún tipo de plan en cuestiones de reforma laboral, política fiscal, financiación local y financiación autonómica. La política económica que defiende un partido constituye su base programática para el resto de temas. Si carecen de planes sobre esto, serán unos tipos caminando por la calle.