Yoani Sánchez mintió en Praga sobre origen de CD y unidades USB circulados en Cuba

Yoani Sánchez mintió en Praga sobre origen de CD y unidades USB circulados en Cuba

Norelys Morales Aguilera.- Con un título que anuncia una cosa y en esencia es otra, Radio Praga trae noticias de la “globera” tras unos días de turismo después del fracaso brasileño: “Yoani Sánchez describe en Praga la realidad del periodismo alternativo en Cuba”.
El articulista, Sánchez y Eliecer Ávila consideran que el único periodismo alternativo que se hace en Cuba es el de un puñado de contrarrevolucionarios que parecieran ser buscados por los cubanos, como si el discurso cansón de la “disidencia” fuera una alternativa real en la Isla.
Según Radio Praga en la conferencia impartida en la Facultad de Ciencias Sociales de la Universidad Carolina Yoani dijo a los asistentes, que el acceso a Internet sigue siendo en Cuba “caro, lento y restringido” pero según explicó Yoani, ha surgido un modo de intercambio de información que suple en parte estas carencias.
Así mintió y manipuló sobre el asunto: “Hay un mercado o red alternativa por la que circula la información y, claro está, muchos de nuestros blogs. Una persona se conecta a la web, y en un ‘memory flash’ copia una página que le interesa, una información que, piensa, puede ser leída por muchos otros, un pequeño audivisual, una canción en mp3, y ese ‘memory flash’ viaja físicamente a otro amigo, que a su vez lo traslada a otros amigos. Y con una sola persona conectada al ciberespacio pueden estarse informando cientos, miles de cubanos”.
Lo que no dijo es que según El Nuevo Herald un grupo de expertos en computadoras trabajan desde Miami en expandir “información libre de censura” a Cuba mediante el envío de unidades USB, discos compactos y tarjetas de memorias SIM para teléfonos celulares. ¿Quién los financia y qué motivos tienen?
Tampoco se atrevió a decir que Ley Torricelli, establece que Cuba se puede conectar, pero no participar del comercio electrónico, del cual su sitio web participa. También dicha ley dispone que cada megabyte que Cuba contrate tiene que ser aprobado por el Departamento del Tesoro.
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