Yoga aéreo, una disciplina para audaces

Serie del "El Guerreo" adaptada a Yoga Aéreo

El yoga aéreo nos permite experimentar con la gravedad. Sin perder los objetivos principales del hatha yoga, este nueva tendencia de yoga combina la disciplina de tela acrobática con el yoga y nos brinda una nueva y dinámica forma de armonizar cuerpo y espíritu.
Durante las clases cada alumno despliega su esterilla, que extiende bajo las telas de colores suspendidas desde el techo. La actividad comienza desde el suelo con el canto del OM, ejercicios de pranayama o respiración consciente y meditación. A medida que la clases va tomando ritmo, los alumnos van subiendo a las telas.
Los grados de dificultad se adaptan a cada alumno de la clase, ya que las clases de yoga aéreo no están masificadas. Suele haber entre ocho y diez hamacas por clase, ya que la disciplina requiere la atención absoluta del profesor sobre cada alumno y la adaptación de las asanas en tela a su capacidad.
Se pueden combinar asanas que dejan una parte del cuerpo suspendida en el aire y la otra en el suelo para mantener la estabilidad con asanas en las que todo el cuerpo se entrega a la tela aérea.
ELONGAR Y RELAJAR EL CUERPO ENTREGÁNDOLO A LA GRAVEDAD
El objetivo es conseguir una intensa elongación y relajación del cuerpo al entregarse al efecto de la gravedad. Se ponen en funcioamiento cada uno de los músculos del cuerpo y se hace especial hincapié en el área de al columna vertebral.
El yoga aéreo es muy terapéutico para las personas con problemas en al columna vertebral ya que precisamente la entrega de la columna a la gravedad la estira y la relaja – abriendo los espacios intervertebrales y reubicando la columna en su sitio ideal, sin ningún esfuerzo. Tan sólo relajando al máximo el cuerpo y respirando conscientemente.
Las diferentes posiciones logradas con las posturas del cuerpo sobre la tela y el juego que se genera con el contrapeso en el aire, realizan un doble trabajo en los músculos que están en contacto con la tela, provocando una sensación diferente a cualquier otra actividad.
LA MARAVILLOSA SENSACIÓN DE LA SUSPENSIÓN DEL CUERPO EN LA TELA...
La simple sensación de la suspensión del cuerpo en la tela es una experiencia en sí misma y más combinada con una actividad como el yoga.
Se genera un clima de bienestar y relajación único para los alumnos que se refleja en sus caras tras la sesión de yoga aéreo.
CAMBIOS RADICALES A NIVEL FÍSICO Y ESPIRITUAL CON ESTA PRÁCTICA
Los propios practicantes coinciden en explicar que han experimentado cambios radicales no solo a nivel físico, sino a nivel espiritual.
Además reconocen que el trabajo a nivel muscular es más profundo que en otros tipos de yoga y que el yoga aéreo les permite realizar una actividad que además les motiva, les divierte y les sorprende con su encanto y su audacia.
Altamente recomendable.
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