Los helados además de ser refrescantes, nos ayudan a estar hidratados a la vez que no aportan nutrientes necesarios para el organismo: hidratos de carbono, proteínas, grasas, vitaminas y minerales.
Aunque claro, hay que distinguir los helados de base láctea (helados de crema y leche) y los de base de agua (sorbetes principalmente). Los primeros se consideran un alimento nutritivo, gracias a su contenido en calcio y proteínas, aunque y debido a su contenido en grasas saturadas y su alto aporte calórico, se debe consumir con mucha moderación.
Los helados con base de agua por el contrario, aportan muchas menos calorías, pero a no ser que sean artesanos y tengan una base de fruta natural, solamente contienen hidratos de carbono simples o azúcar.
Para los que tengan niños, o quieran comer un helado más bajo en grasa y calorías, otra rica opción puede ser el yogurt helado.
Partiendo de esta base, Danone ha creado Yolado, “mitad yogurt, mitad helado”. No, no es su slogan. Es lo que le digo a mi hija cuando me pide helado. La niña viviría a base de helados….
Gracias a Yolado (antes lo hacía con los Petit Suisse) he conseguido tenerla a raya con el consumo de helados (es una monstruíta “come-helados”), ya que Yolado ofrece los beneficios nutricionales del yogurt, (bacterias probióticas beneficiosas incluidas) con el placer del helado. Sin conservantes, ni colorantes artificiales y con menos de 100 Kcal en su envase individual, ¿Interesante, no?
Otra de las ventajas de Yolado, es su presentación. Se compra en la sección de refrigerados y se congela en casa. De esta manera no se rompe la cadena de congelación por el camino. (No sé a vosotras, pero a mi me ha ocurrido más de una vez. No hay cosa que me guste menos que un helado re-congelado o cristalizado).
Por nuestra parte, Yolado ha pasado la prueba de mi “experta” y se ha hecho un hueco en nuestro congelador. (El sabor que más nos gusta es el de fresa).
Besos desde mi blog!!!
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