Hace unos días me escribía Jessica para mostrarme las fotos de la reforma que le había hecho su empresa a una pareja de clientes jóvenes en Zaragoza y me encantó lo que vi. Se trata de un piso de 100 m² que necesitaba cambiar la cocina, el baño y los acabados del resto de las estancias.
Me gusta mucho como la madera de roble se repite en varios lugares de la casa sin agobiar, en suelo, revestimientos y muebles, creando un hilo conductor en una decoración de aires nórdicos.
Las piezas de mobiliario elegidas son sencillas y funcionales, perfectas para una pareja joven, que busca comodidad, luminosidad y espacio de movimientos, lo mismo que la gama cromática: colores neutros, blancos y pasteles, son la nota predominante.
Como veis, no importa el tipo de vivienda o lugar donde se resida, nuestra casa también puede ser de estilo nórdico ;) ¿Qué os parece este piso de Zaragoza?
Vía: Reformas Zaragoza, Interiorismo: Jessica Zueras, arquitecta: Laura Moliner
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