007 y la reina afortunada

Por Nenaproblemas @elisabetgimeno
Aunque nunca me han gustado este tipo de rituales, acabé viendo parte de la ceremonia de inauguración de los Juegos Olímpicos de Londres. Muy a pesar del Támesis, Mary Poppins y Peter Pan, sin duda alguna quedará para el recuerdo la llegada de Isabel II escoltada por James Bond (para recordar aquí). Supongo que en aquel momento un alto porcentaje de los televidentes pensó que la reina era una mujer afortunada donde las haya. Yo también lo pensé. Ahora bien, eso ya lo creía cuando era pequeña.Mi infancia estuvo llena de música clásica, libros, muñecas, dibujos animados y películas. Durante aquellos años vi casi todas las aventuras de 007 al servicio de Su Majestad, siempre bajo la atenta mirada de mis progenitores. Me encantaban la acción, los gadgets, el Aston Martin y los vestidos. Por entonces mezclaba todos los argumentos y aún lo hago. Sin embargo, una película protagonizada por el agente especial todavía es una buena propuesta de ocio. Dejando de banda lo bien que me lo pasaba asistiendo a las hazañas de 007, estaba completamente convencida de que la reina de Inglaterra era una mujer con suerte. Me explico. En 1952 Ian Fleming creaba a James Bond y en 1953 Isabel II subía al trono. Por lo tanto, primero en la literatura y luego en el cine, durante casi 60 años la monarca ha tenido a su servicio a un atractivo agente con seis caras diferentes. De ahí que mi mente infantil, poco habilidosa a la hora de distinguir los límites entre la realidad y la ficción, considerara que la diosa Fortuna le había dedicado a Isabel II una de sus mejores sonrisas. Ahora que ha pasado el tiempo voy un poco más allá y, si yo fuera ella, me hubiera sacado una foto con cada uno de los seis agentes hasta el momento. Claro que a lo mejor la muy picarona ya lo ha hecho y nadie lo sabe.Para acabar pienso en los herederos de la reina y me viene a la mente la siguiente cuestión estética. Nunca tendrá tanto morbo ni será tan entrañable la expresión "007 al servicio de Su Majestad" como con Isabel II.