1. Artísticamente (y seguramente) no es una gran portada (pero en periodismo no hacemos arte); Hacer una tapa de la Feria del Libro de Córdoba es un desafío.
Desde que tengo uso de razón, las mismas carpas que albergan los stand que tiene los mismos diseños y distribución pueblan por 15 días la Plaza San Martín.La nota era un recorrido por la feria.Mostrar los stand? No, más de lo mismo.Mostrar el contexto con alguien leyendo? No, más de lo mismo.Una panorámica con los pasillo y la gente mirando? No, otra vez no.Y si mostramos las carpas? pero del lado de afuera; las mismas que uno siempre tiene que esquivar cuando cruza la plaza apurado y que, obligatoriamente, te invitan a girar la cabeza para ver, medio borroso, lo que hay adentro? En fin, lo que busque fue mostrar una imagen con la que todos los cordobeses se han topado cada setiembre; busque generar esa "conexión" emocional con el lector desde la portada; y es casi un homenaje a esas manos de lona, las mismas que hace 28 años cuidan los libros: las carpas.
2. Hacía mucho que no ilustraba; la nota hablaba de los tuertos, aquellos con póder que no quieren que la Ley de Medios le dé lugar a las nuevas voces y se niegan a ver a nuevos talentos o expresiones que piden pista en pequeños medios.