1. Evalúe su factor "placer". ¿Convertir una actividad de ocio favorita en una empresa sería algo muy bueno? Algunas personas descubren que sí, pero cuando cuando comienzan a hacerlo la felicidad que encontraban haciéndolo se les va. Es importante meditar cuanto en verdad ama su pasatiempo y si seguiría disfrutándolo después de convertirlo en un negocio.
2. Analize el mercado. Digamos que le gusta hacer galletas, y sus amigos y familiares siempre le alaban por eso. Analize si hay gente que estaría dispuesta a pagarle por su talento, también si su talento ha crecido al nivel de otras personas en el mercado. Debe Ser honesto consigo mismo. Si la respuesta es sí, pregúntese cómo podría sobresalir en la competencia. Quizás llenando un nicho en especial y ofrecer precios más bajos que los de la competencia.
3. El precio. Es importante cobrar lo suficiente por un producto o servicio para generar ganancias. Para determinar el precio correcto, necesita sumar sus gastos y calcular los factores intangibles, como el tiempo que le demanda la tarea. Luego pregúntese ¿estaría la gente dispuesta a pagar esa cantidad.
4. Pruébelo. Hasta aquí ya se tiene mentalidad de empresario, y los empresarios analizan bien los riesgos, por ello considere iniciar su negocio para ganar dinero como un trabajo de medio tiempo sin abandonar su empleo formal. Eso si tenga en cuenta que los clientes van a esperar el mismo tipo de servicio que obtendrían de una operación de tiempo completo. Esté preparado para poner todo de su parte y manejar el crecimiento de su nuevo negocio con atención.
5. Calcúle. Evalué el capital de su empresa, la cantidad de dinero que necesitará para ponerla en pie y operarla, y su capital de trabajo, la cantidad que necesitará para mantenerse a flote hasta que genere ganancias, elabore un plan donde no espere ganancias a 6 meses. Es la forma para saber cuánto dinero puede gastar y en qué deberá invertirlo primero y en qué después, lo que le ayudará a evitar quedarse sin dinero muy pronto.
Mientras tanto, intente deshacerse de la mayor cantidad de deudas posible. Iniciar un negocio es más divertido y menos estresante, si no se tienen deudas, lo que a su vez le permitirá ser más creativo.
6. Hágalo bien. Trate su hobby como un negocio de verdad en vez de sólo un pasatiempo. Implemente un sistema de contabilidad para seguir de cerca la cuenta de sus ingresos y gastos. Consulte si debería registrar su empresa en la base de empresas que se gestione en su país.
7. Escogiendo un nombre. El nombre de su negocio es el inicio de su nueva marca, así que escójalo bien. Asegúrese de que sea fácil de recordar y escribir, y que indique la naturaleza de su empresa. También averigüe si la dirección electrónica del nombre que ha elegido está disponible. de lo contrario confundirá a sus clientes utilizando un nombre con un sitio web distinto.
8. Distribución de los productos del negocio. ¿Cómo va a vender su producto, servicio o negocio? ¿Desde dónde va a operar? Algunos negocios que nacen de pasatiempos sólo venden a través de ferias comunitarias, mercados de pulgas o vía Internet, Le recomiendo leer: Tu tienda virtual para ganar dinero por Internet. Si planea trabajar desde su casa, debe asegurarse de que en su zona se permite la apertura de negocios que operen desde viviendas, en la mayoría de casos esto no se necesita cunado el medio de trabajo es Internet.
9. Su sitio Web. Hoy en día, todo pequeño negocio necesita una presencia en la web. Es como estar listado en la guía telefónica. Un sitio web creíble no necesita demasiados adornos ni exige una gran inversión, por ello no se preocupe. Hay muchas herramientas de bajo costo de diseño de sitios web que son fáciles de usar. Otra alternativa es crear un blog gratis en wordpress o Blogger, también un perfil en una red social que represente su negocio, o anotarlo en un directorio de negocios en línea. Si lo desea puede abrir una tienda dentro de un mercado en Internet como eBay.com o Mercadolibre.com.
10. El Marketing. Si no tiene suficiente dinero para invertir en marketing, hay recursos excelentes que no cuestan mucho dinero. Por ejemplo, podría crear una página en Facebook y ofrecer incentivos a quienes lo sigan. También podría permanecer en contacto con clientes frecuentes o potenciales a través en un boletín en línea.