10 cosas que los viajeros hacemos diferente

Por Evangelina Gonzalez Rodriguez @evanocaterli

1. Caminar:
Es obvio, todos los saben. Los viajeros y en especial los mochileros somos de caminar bastante. El tema es como caminamos. Lo hacemos lento, observando las nubes, las caras, las palomas, los colores, respirando suave y disfrutando exactamente lo que está ocurriendo. Somos como un observador fascinado por lo que ve. Lo lindo de viajar y andar sin prisa es que disfrutamos cada detalle de lo que hacemos.

2. Socializar:
Este punto depende si viajas solo o con un compañero. Pero viajando, uno socializa de otra forma, mucho más rápido. Las amistades se vuelven mucho más fuerte en pocos días, compartís con alguien que acabas de conocer como si lo conocieras de toda la vida. Empezás a confiar más en los demás, dado que tenés mucha confianza con vos mismo desde hace algún tiempo.
Cuando alguien mayor te dice que “el mundo es una porquería y que las personas son muy malvadas”, en ese momento es cuando estas pensando en pajaritos y te cubrís con una barrera de puro amor, porque sabes que ese tipo de energía no es la que estás buscando. Siempre digo que las personas que llegan a mi vida son todas buenas y generosas, y no me he equivocado en ello.

3. Hacer las compras:
Por ninguna de las razones del mundo comprarías algo de tamaño de viaje. En alguna parte de tu viaje compraste demasiada comida basura y ahora comes muy saludable. La mayoría de tus ingresos se van en museos y pasajes.
Ayudas a la gente de la calle, porque sabés que no es fácil dormir en cualquier lado y comer lo que haya.

4. Trabajar:
No importa si trabajas viajando o trabajas antes y después de viajar. Lo que nos une a todos los viajeros es que trabajamos solo, y únicamente para continuar nuestros recorridos.
Por lo general somos personas motivadas a la hora de trabajar. No planeamos quedarnos en un trabajo de oficina para toda la vida, ni queremos depender de una empresa hasta que nos jubilemos y estemos demasiado viejos para viajar.

5. Empacar:
Hemos hecho y deshecho tantas mochilas o maletas que podemos hacerlo en 5 minutos. Nuestro equipaje pesa menos cada viaje, utilizamos menos ropa al cabo de un tiempo. Dejamos de llevar cosas “por las dudas” (las dudas pesan mucho). Sabemos que si llegamos tarde a tomar un tren no podemos correr con muchos kilos en la espalda. Si viajaste mucho tiempo seguido, tu mochila se convirtió en tu hogar portatil.

6. Hospedarnos:
Nos sabemos todos los trucos para ahorrar o directamente no pagar hospedaje. Hacemos intercambios. Buscamos sitios donde podamos relacionarnos con gente del lugar para conocer mejor la cultura. Hacemos planes pero no son rutinarios, sabemos a donde vamos y por cuanto tiempo, pero de lo demás se encarga el viaje. Llevamos tapones para los oídos.

7. Transporte:
Utilizamos el transporte público, volamos Low Cost, utilizamos trenes o buses en oferta, y por supuesto si se puede hacer auto-stop lo aprovechamos.

8. Tenemos un “sexto sentido”:
Cuando sientes que te están engañando seguro que lo están haciendo, ¡confía en tus instintos!
En general las chicas que viajamos solas tenemos que tener nuestra intuición alerta, muchas personas quieren aprovecharse de nuestra situación, lo bueno es que ya aprendimos a cuidarnos.

9. Sentido de orientación:
Aunque no contemos con un mapa, podemos regresar al punto de salida sin pasar por los mismos lugares. Intuitivamente sabemos por donde debemos ir, sumado a que perdimos la vergüenza a preguntar.

10. Confianza
No tenemos ni idea que va a suceder, pero vamos seguros y sin expectativas a vivir las nuevas experiencias que el viaje nos regala.

11. Este punto lo dejo libre así me comentas que hacemos diferente los viajeros.