10 detalles maravillosos de 'El Imperio Contraataca'

Publicado el 17 noviembre 2015 por Doctorindy

¡Sigo aquí, queridos! Reconozco que este mes no tengo gran cosa que poner por aquí. Si me echáis de menos, recordad que aquí voy comentando brevemente cada peli que veo, así como pelis ya conocidas de las que me apetece comentar algo nuevo, y que hace nada he escrito una reseña de la apoteósica 'Comando' en Zona Zhero.
Para el blog me reservo esta particular celebración de la trilogía original de Star Wars de cara al estreno de 'El Despertar de la Fuerza'. Nos toca 'El Imperio Contraataca', la mejor película de la saga con tanta autoridad que he necesitado 10 apartados en vez de 5. Si Star Wars es la mitología estadounidense que es hoy es gracias a esta peli. Es lo que elevó la historia y los personajes. Es lo que convirtió a 'Star Wars', una estupenda y revolucionaria peli de aventuras, en STAR WARS. Vamos a echarle un ojo a sus mayores hallazgos.
- John Williams
Vale, esto es algo muy general, pero es obligatorio mencionarlo. En la primera entrega Williams ya dejó una huella imborrable en la historia del cine, así que me alucina que en la segunda no reutilice lo compuesto anteriormente más de lo necesario y sea capaz de darnos temas tan o más memorables que los de entonces.


Y me guardo otro para más adelante...
- El primer acto lo avanza todo

Soy muy fan de las historias tan perfectamente construidas que saben a dónde van desde el minuto 1, que abren tramas y cuestiones para darles carpetazo al final de forma plenamente satisfactoria a través de un viaje con significado. Sentimos que han pasado cosas importantes. Que el status quo ha cambiado. Es narrativa básica, pero hay que saber hacerlo. El guion de EIC es perfecto. Es llamativo que la historia "general", la guerra entre la Alianza y el Imperio, apenas avance, y sin embargo al acabar el film sea evidente que todo ha cambiado, que hemos asistido a algo gordísimo. Porque los personajes y sus relaciones sí han avanzado, a lo bestia. Esta cinta tiene más de drama que de aventura.
Me voy por las ramas. Lo que quería decir es que todo encaja en su sitio, todo está calculado, y según podéis ver aquí, es un film simétrico. Se dice que, por ser el capítulo intermedio, no tiene ni principio ni final. Falso. La peli cierra todo lo que empieza. Fijémonos, por fin, en la parte de Hoth. Luke se lleva hostias, su vulnerabilidad es evidente. Depende de los demás. Han se tiene que ir, corre peligro, pero siempre pone a Luke y Leia por delante. Leia no admite que siente algo por Han ni se muestra vulnerable por pura burrería. ¿Y qué acaba pasando? Que cuando Luke va solito a enfrentarse a Vader, queda destrozado y traumatizado porque no está listo para lo duro de verdad. Que Han es torturado, congelado y vendido a su mayor enemigo. Él paga el pato, el que no debería estar metido en esto pero lo está porque es un héroe. Incluso cuando van a congelarlo su mayor preocupación es que Chewbacca cuide de Leia. Y Leia admite que le quiere, llora y se abraza a Chewie. ¿Que no hay final? Claro que lo hay, lo que pasa es que no es feliz. Pero cierra el arco dramático de los héroes por completo, uno que como vemos, se abre casi sin que nos demos cuenta... desde el minuto 1, como decía.
- Vader, el puto amo

Vader no puede ser mejor en esta película. Es incansable, cruel, inteligente, siempre tiene razón y no duda en cargarse a cualquier subordinado que cometa un error. En la primera ya asomaban esas características, pero tenía que responder ante Tarkin. Aquí es tan guay que hasta convence al Emperador de que lo mejor es intentar arrastrar a su hijo al Lado Oscuro. Y hará lo que sea para cazarle. Encima el tío es elegante. La forma de decir "disculpa aceptada... capitán Needa" me mata. Porqueencima  James Earl Jones está pletórico aquí, más que nuestro Constantino Romero..
- Campo de asteroides
Adoro esta escena, simplemente. Pura aventura. Esta era la música que me estaba reservando.

-Yoda se hace el tonto

Todos idolatramos a Yoda y sus enseñanzas, así que solo me centraré en la brillante prueba que le hace a Luke nada más conocerle. Tan simple y efectiva para saber de qué pasta está hecho nuestro protagonista. De paso nosotros comprendemos qué tipo de maestro es Yoda y cuál será la base de sus lecciones, cuáles son, en definitiva, las virtudes imprescindibles de un Jedi. Unas virtudes que Luke no parece poseer. Todo a través de una marioneta dotada de una expresividad que conquista a cualquiera.
- La visión del futuro

Esto es una pequeñez que me encanta. Vader tortura a Han (el que paga el pato, ya digo), pero como vemos más adelante, sin hacerle ni una sola pregunta. ¿Para qué le tortura entonces? Para provocar una premonición a Luke y atraerle a la Ciudad de las Nubes, algo que vimos ANTES de la escena de la tortura. Sí, Vader es tan listo que cambia el pasado desde el futuro. La guinda del pastel: rollos temporales. Poca cosa, pero ahí está. Esta película no puede molar más.
- "Lo sé"
La respuesta de Han es mítica, y sí, encaja mejor con el personaje que el clásico "yo también te quiero", pero no creo que el bueno de Harrison Ford (aquí ya convertido en la mejor versión de sí mismo, una estrella lista para brillar de forma constante durante más de una década) comprendiese que esa respuesta que propuso significa mucho más que cualquier otra réplica. Han y Leia no pueden gustarse más ya casi desde la anterior peli, siendo aquí una de las primeras ideas que nos quieren dejar claras en el inicio del film, y por eso agradezco que cortasen alguna que otra escena en la que hay indicios de romance entre la princesa y Luke (es evidente que no estaba planeado que fuesen hermanos), porque ella está loca por Han y solo por Han. El caso es que las personalidades y responsabilidades opuestas de cada uno hacen que no paren de pelearse, para nuestro gozo. Unos divertidísimos piques que irán desapareciendo tras el inevitable primer beso para dejar paso a una progresiva complicidad y honestidad entre ambos. Y de repente todo se va a la mierda. En el cielo, entre las nubes, bajamos al infierno, con esos colores rojizos, el vapor amenazante y un monstruo impasible presidiendo lo que podría ser la muerte de Solo, o peor, una eternidad congelado en manos del misterioso y terrible Jabba el Hutt. Han y Leia podrían no verse nunca más. Ella finalmente confiesa lo evidente... y él dice que lo sabe. Que a pesar de las broncas y los insultos, lo sabe. Que en el peor momento de su vida, está en paz porque sabe que ella le quiere. Perfecto, sin más.


- El duelo
La saga nunca se ha caracterizado por una dirección deslumbrante o revolucionaria, la historia siempre ha pesado más. Afortunadamente, la mejor historia contó con Irvin Kershner, un director bastante anónimo pero que sabía muy bien lo que se hacía. Gracias a él los actores están muchísimo mejor que en cualquier otra entrega, y logra sacar todo el jugo al guion, aprovechando mejor que ningún otro director en la franquicia los escenarios y la fotografía. El enfrentamiento entre Luke y Vader es la cúspide de su trabajo. Las coreografías espectaculares de las precuelas no me aportan nada comparadas con el estilazo visual y la dureza de este combate, en el que Luke pierde ya solo por sacar primero la espada. No tiene nada que hacer, Vader lo sabe y se limita a comprobar hasta cuándo podrá aguantar nuestro protagonista, que lo da todo con cada movimiento, en vano. El escenario va cambiando y se vuelve cada vez más axfisiante para Luke, al tiempo que Vader aumenta la violencia de sus ataques. Al final termina totalmente arrinconado, a merced de lo que Vader, un villano monumental que ha sido el motor de todo el film, quiera hacerle... o decirle.

- El giro
Lo acabamos de ver, y nos lo sabemos de memoria. Es parte de la cultura popular, tanto, que muchos sentimos que siempre lo hemos sabido. La cuestión es que esta revelación no necesita la sorpresa para ser la hostia. No es un golpe de efecto culebronesco, es la conclusión perfecta e inevitable para una historia en la que Luke no ha dejado de fracasar y sentirse como una mierda, y en la que el temor a convertirse en un Vader 2.0 es constante. Además, da una nueva capa y una motivación más completa al villanazo que ha dominado la función. Muy TOP.
- Todo el mundo pierde
Que la peli acabe más bien mal es celebrado por todos. La derrota de los buenos es evidente, pero lo que ADORO es que Vader tampoco gana. Cuando el Halcón Milenario se pierde definitivamente de vista, Vader, por una vez, no se cabrea con sus hombres. Porque ya da igual. Todo lo que había hecho era para poner a Luke de su lado. No lo ha conseguido. El también ha fracasado. De verdad, todo está bien en esta película.
Una película, que insisto, elevó a Star Wars a la categoría en la que está hoy. Por si fuera poco, ahora cualquier saga quiere tener su propio Imperio Contraataca, evidenciando que es, sin lugar a dudas, la secuela que tener como referencia.