Su familia ha llegado a los parques temáticos, los museos de arte icónicos, los estadios de béisbol y los parques nacionales. Usted ha hecho un viaje por carretera, caminó por Times Square, conquistó rápidos de aguas bravas y comió rollos de langosta en Maine y barbacoa en Texas. Y todo lo que hace es encender la pasión por los viajes de sus hijos. Cuando esté planeando su próximo viaje, vea uno de estos destinos donde el aprendizaje, la aventura y la diversión son parte del paquete.
1. Deambular con dinosaurios en Utah
"En el tiempo en que los dinosaurios vagaban por la tierra" es un estribillo familiar, pero hasta que no veas los fósiles de cerca, es fácil subestimar el significado de estas bestias casi míticas. Un viaje al Monumento Nacional de Dinosaurios de Utah (nps.gov/dino/index.htm) les da a los niños una comprensión clara de cuán reales y asombrosos fueron los antiguos reptiles. Hay todas las actividades estándar que esperaría encontrar en un estado conocido por su actividad al aire libre: rafting, pesca, excursionismo, acampada y excursionismo en el remoto y accidentado país. Pero esta área de 80 acres, la mayor cantera de huesos de dinosaurios en los Estados Unidos, presenta algo que los niños no esperan de un Monumento Nacional: huesos fosilizados, muchos de los cuales están parcialmente expuestos e intactos, de cientos de criaturas prehistóricas incrustadas en la roca formaciones Como beneficio adicional, pueden observar de cerca los restos de dinosaurios en el Parque Estatal del Museo de Historia Natural de Utah Field House, en Vernal, a 20 minutos del monumento. (No te lo puedes perder desde la carretera, es el edificio con el tremendo estegosaurio afuera). Planifica tu viaje de manera correcta y verás uno de los festivales estacionales de la ciudad o las celebraciones de rodeo.
2. Estudiar historia afroamericana en Washington D.C.
El Museo Smithsonian de Historia y Cultura Afroamericana (nmaahc.si.edu), que se inauguró en septiembre de 2016, es la culminación de años de trabajo, desde la búsqueda y adquisición de los 35,000 artículos que conforman la colección, muchos de ellos donados por descendientes de esclavos y dueños de esclavos, hasta la dura batalla del Congreso por La financiación, que comenzó cuando el presidente George W. Bush autorizó su construcción. Ubicado en el National Mall, el amplio museo de 400,000 pies cuadrados es un relato cronológico de siglos de historia afroamericana en los Estados Unidos: la angustia y los logros. La historia comienza a 70 pies bajo tierra en un espacio dramático dedicado al comercio transatlántico de esclavos. Los salones de exhibición cubren la esclavitud, la emancipación, la segregación, los derechos civiles y los eventos actuales, cuentan historias en texto, versos e imágenes, salpicados de objetos como el bastón de Frederick Douglas, la biblia de Nat Turner, la fotografía policial de Rosa Parks y la fotografía de Harriet Tubman. Los pisos superiores son una celebración de la cultura y los deportes, con grabaciones de videos musicales y grabaciones que animan el espacio. Es una lección de historia estadounidense que los niños nunca olvidarán.
3. Baila y cena en Nueva Orleans
Si hay algo que debes saber sobre Nueva Orleans, es que hay mucho, mucho más en la ciudad que Bourbon Street. Especialmente para niños. Primero, está la comida. ¿A quién no le encantaría sentarse bajo la carpa gigante que se extiende sobre el patio de tiendas de campaña de Café du Monde, el olor a azúcar en polvo y dulces fritos en el aire, y disfrutar de uno o dos beignet clásicos? (Padres: hay un suministro constante del famoso café de achicoria para usted). Las excursiones guiadas que le dan a los niños una idea de las leyendas y el pasado legendario de Nueva Orleans están fácilmente disponibles. Pruebe una excursión vudú o un paseo por el pantano para conocer los mitos y el folclore que definen esta ciudad. Luego revise la historia global en exhibición en el Museo Nacional de la Segunda Guerra Mundial (nationalww2museum.org). Entre sus muchas exhibiciones interactivas se encuentran las dedicadas a la invasión del Día D, la guerra submarina y el ascenso de los nazis al poder, más una película en 4-D narrada por Tom Hanks. Pero podría argumentar que la música llamativa y llamativa captura mejor el espíritu de la ciudad. Los clubes y salas de música no son ideales para los más pequeños, pero la música está en todas partes. Los conjuntos pequeños, pesados en la trompeta y el trombón, y los jugadores de saxofón solos a menudo estallan espontáneamente en la música en la acera o en los parques, y el baile no se puede contener.
4. Diríjase al oeste a un rancho tipo
La leyenda del oeste americano es una piedra angular de la mitología de nuestro país, y la idea de un rancho de amigos es el material de las fantasías de los vaqueros, con los recorridos de ganado, las cabalgatas, las fogatas y el ritmo descortés. Todos los niños deben tener la oportunidad de vislumbrar la realidad cotidiana, tanto los deberes como los placeres, de un ranchero en Wyoming, Montana, Arizona o cualquiera de los magníficos estados occidentales de este país, un regreso a la – un estilo de vida terrestre que incluso podría hacerle olvidar su pitido, zumbido, dispositivo de timbre. Sin embargo, no todos los ranchos no son iguales, por lo que es importante buscar lugares que sean especialmente amigables para los niños. El rancho de sables cruzados (crossedsabresranch.com) en Cody, Wyoming, a ocho millas de la entrada este de Yellowstone, cuenta con tiro con arco, búsqueda del tesoro, tours de Yellowstone y, para aspirantes a estrellas de rodeo, clases de cuerda. En Averill's Flathead Lake Lodge (flatheadlakelodge.com) en Bigfort, Montana, aproximadamente a una hora del Parque Nacional Glacier, los niños pueden aprender lo básico sobre el cuidado de los caballos con un programa Wrangler Junior, hacer kayak y nadar en el lago, y participar en un frito de bistec de montaña en el bosque, un miércoles por la noche. Tradición con música en vivo.
5. Muestra algo de orgullo de Texas
¿Recuerdas el Álamo? Una visita al sitio de la batalla en San Antonio asegurará que los niños nunca olviden el histórico choque. Pero ahora es el mejor momento para explorar la ciudad del sur de Texas, la séptima más grande de los EE. UU., Porque el 2019 marcó su 300 aniversario, por lo que las cosas están más vivas que nunca. Tómese suficiente tiempo para explorar el corredor cultural de Broadway, un tramo de dos millas a lo largo del río San Antonio que recientemente se sometió a un rejuvenecimiento de $ 500 millones. Usted puede entrar y salir de sitios notables como el Museo de San Antonio, que hace retroceder los relojes con su arte clásico; el DoSeumthedoseum.org), un museo interactivo para niños; el Jardín Botánico de San Antonio (sabot.org), el zoológico de San Antonio de 50 acres (sazoo.org), y el Museo Witte (wittemuseum.org), una institución que narra la historia galvanizadora del estado de la estrella solitaria, desde la antigüedad hasta la actualidad. Los niños pueden profundizar en la historia de la región en las misiones, construidas por sacerdotes franciscanos cuando llegaron en el siglo XVIII. Estas mini ciudades, que en conjunto constituyen un sitio del Patrimonio Mundial de la UNESCO, abarcaban todo lo que los primeros colonos necesitaban para mantener una comunidad autosuficiente, como capillas y talleres de artesanos, y algunos son aldeas que aún funcionan, con taquerías y arte público modestos.
6. Siga el sendero de jarabe de arce en Vermont
Una industria por excelencia de Nueva Inglaterra, las casas de azúcar y los bosques de arces de Vermont pueden servir como la piedra angular de una escapada memorable centrada en la naturaleza. En muchas granjas, los trabajadores se dirigen al bosque para aprovechar los arces durante todo el año, y muchas propiedades están abiertas para los visitantes, ofreciendo una lección sobre el proceso histórico con visitas guiadas y, por supuesto, muchas muestras. Algunas son operaciones familiares, como Sugarbush Farm (sugarbushfarm.com), que cuenta con 8,500 árboles que producen cuatro grados diferentes de jarabe, así como una operación de producción de lácteos que produce queso cheddar. Los arces de Mitch (mitchesmaples.com), una institución con más de 70 años de edad, está abierta todo el año, pero los tours solo se ofrecen durante la primavera. El resto del año, es un destino popular para abastecerse de todo tipo de dulces de arce. La granja de arce de Goodrich (goodrichmaplefarm.com) es conocido por sus fiestas de "azúcar en la nieve", en parte dulce indulgencia, en parte lección de física. (¿Cómo explicar la caramelización de azúcar a 231 grados en contacto con la nieve?) Para profundizar en la ciencia del proceso y la historia de la industria, asegúrese de tener la ciudad de Rutland, sede del Museo Maple, en el itinerario.
7. Mira a la Vía Láctea
La limpieza del planeta es el centro de muchas conversaciones en estos días, desde la eliminación de los plásticos de un solo uso y la importancia del reciclaje para la energía verde y la conservación de la vida silvestre. Pero no hablamos tanto de limpiar el cielo. A medida que las ciudades se expanden, aumenta la contaminación lumínica y, para aumentar la conciencia sobre el tema, la Asociación Internacional del Cielo Oscuro (darksky.org) está haciendo grandes avances en la preservación de la oscuridad de la noche. Una organización sin fines de lucro que crea conciencia sobre los impactos negativos de la luz artificial nocturna en la salud humana y la vida silvestre, se ha establecido en Lugares del cielo oscuro en los cinco continentes. En América del Norte, los sitios van desde parques nacionales y monumentos hasta bosques y lagos, algunos de los cuales tienen programas familiares para orientar a los visitantes hacia el paisaje celeste. El tour de Astronomy Rangers en el Parque Nacional Bryce Canyon, por ejemplo, promete vistas de aproximadamente 7,000 estrellas en su tour. No tienes que ser un niño para sentirte maravillado como un niño cuando te enfrentas a cometas deslizantes e innumerables estrellas que atraviesan la oscuridad.
8. Reforzar y tirar un gancho de izquierda en Louisville
El auge del bourbon ha aumentado el turismo en Louisville, Kentucky, por millones en los últimos años, pero también hay razones para que los niños visiten esta vibrante ciudad, cosas que ilustran el profundo impacto del deporte en la cultura y la sociedad. El centro de Louisville Slugger Museum (sluggermuseum.com) saluda a los huéspedes con una réplica de 120 pies del bate de Babe Ruth y les da a los niños un vistazo detrás del escenario del clásico pasatiempo americano. El destino es una fábrica en funcionamiento y un museo, y las familias pueden realizar un recorrido guiado y práctico de la línea de producción. También hay jaulas de bateo donde los niños pueden hacer un swing y una bóveda de murciélagos que alberga alrededor de 3.000 modelos diseñados durante décadas para los jugadores más famosos de la liga. Unas cuantas cuadras más abajo hay un santuario para su hijo nativo Muhammad Ali (alicenter.org), y es tanto una institución deportiva como un museo que relata los derechos civiles en Estados Unidos. Es compacto pero está repleto, por lo que vale la pena reservar una cantidad generosa de tiempo en su agenda. Busque recuerdos de su carrera en el boxeo, como sus guantes y túnicas extravagantes, y una muestra elaborada de su arte, además de cortes de entrevistas y una estación para sentarse donde puede ver peleas completas en una televisión personal. La participación de Ali en los derechos civiles, el activismo social y la actividad contra la guerra, así como su viaje espiritual, se cuenta en fotografías y videos interactivos.
9. Ponte en contacto con tu vaquero interior y vaquera
Cheyenne Frontier Days, que data de 1887, es el segundo evento más antiguo de los Estados Unidos, superado solo por Mardi Gras. Durante 10 días en julio, miles de personas superan la capital del estado para un evento épico que incluye enfrentamientos ruidosos entre toros y vaqueros, eventos de bronco en Frontier Park, desfiles, conciertos y fiestas. Pero los terrenos son un destino durante todo el año, gracias al Cheyenne Frontier Days Old West Museum (cfdrodeo.com/cfd-old-west-museum/), que alberga una vasta y amplia colección que define el viejo oeste. Trajes, videos y artefactos, junto con un salón de la fama del rodeo, cuentan la historia de los Días de la Frontera, mientras que las exhibiciones separadas se enfocan en otros capítulos de la vida occidental, como la evolución de los carros cubiertos. Las mujeres ocupan el centro de atención en el museo Cowgirls of the West (cowgirlsofthewestmuseum.com), un modesto asunto de escaparate que narra los muchos logros de las mujeres occidentales que explotaron fronteras en los últimos dos siglos. Estos pioneros fueron una parte integral de la historia de Wyoming, como era de esperar del primer estado en el que se otorgó a las mujeres el derecho a votar.
10. Soak Up Science en Nueva York y Nueva Jersey
Desde palacios de arte icónicos como el Guggenheim y el Met hasta pequeñas gemas que destacan temas únicos, como la historia de los faros o el transporte público, no hay escasez de museos en la ciudad de Nueva York. Y si hay una categoría que puede mantener la atención de los niños durante un tramo de maratón del día, son los museos de ciencia de la ciudad. El más obvio, por supuesto, es el Museo de Historia Natural (amnh.org), conocida por su ballena de fibra de vidrio de 94 pies de largo y su renombrado planetario. Pero definitivamente vale la pena hacer tiempo para visitar lugares que están un poco más lejos. En Queens, el New York Hall of Science (nysci.org) presenta exhibiciones sobre biología, naturaleza, tecnología y física, además de mini golf y otras actividades al aire libre. Hay una sala de juegos preescolar y talleres para niños mayores. Está ubicado cerca del zoológico de Queens, el estadio de béisbol de los Mets, el estadio Citi Field y el centro de tenis Billie Jean King (sede del Abierto de EE. UU.), Por lo que es fácil hacer un día. De regreso en Manhattan, el Intrepid Air, Sea & Space Museum (intrepidmuseum.orgestá ubicado en un portaaviones histórico, un buque de combate de la Segunda Guerra Mundial y un Monumento Histórico Nacional, atracado en el río Hudson en el Muelle 84. Los niños pueden explorar el transbordador espacial Enterprise y el Growler, el único submarino de misiles guiados estadounidense abierto al público. Las visitas virtuales a la Estación Espacial Internacional son un punto destacado de la exhibición del transbordador. También puede tomar el tren PATH a través del Hudson hasta la ciudad cada vez más vibrante y moderna de Jersey City, donde se encuentra el Liberty Science Center (lsc.org) tiene exposiciones interactivas sobre el espacio, la vida silvestre, la microbiología y la arquitectura, además de un planetario de alta tecnología y un montón de espacio para escalar para los más pequeños.
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