10 preguntas a julián lópez

Publicado el 20 febrero 2014 por Elalmacendelibros @almacendelibros

Estamos muy agradecidos con el escritor argentino Julián López por la entrevista que nos dio. Julián es el autor de “Una muchacha muy bella”, editado por Eterna Cadencia, historia que disfrutamos muchísimo, que moviliza, conmueve y que esta teniendo mucho reconocimiento.

Pueden ver AQUÍ la reseña que hizo Malena Sánchez Moccero para el blog de “Una muchacha muy bella”.

¡Gracias Julián!

ENTREVISTA: 

¿Cómo empezaste tu carrera como escritor y cuándo?

En la primaria escribía buenas composiciones, pero a los 10 años, una tarde de domingo bastante triste, se me fue la mano, como si ella hubiera sabido, y no yo, lo que tenía que hacer. Ahí mismo escribí dos poemas, de los que lamentablemente y por suerte no conservo más que los primeros versos Y aquellos que se fueron para siempre perdurarán // y aunque la muerte los llame con nosotros se quedarán //Ahí fue que escribí por primera vez como algo que era un destino y que se ponía por delante de mí, se imponía

¿Te inspiró alguien en particular?

No alguien, fue –y creo que sigue siendo- como una acumulación de algo que uno percibe y no percibe a la vez, quizás fue la luz de esa tarde de domingo.

¿A qué hora del día te surgen más ideas?

¡No tengo idea! y ahora que escribo esto es la tarde. Supongo que los bichos del ideario empiezan a desplegar sus alas con la caída del sol. Pero tiendo a creer que el plano de las ideas es bastante más inmaterial y no hay horas, ni luz u oscuridad que lo enciendan o lo apaguen.

¿En qué lugar de tu casa te gusta escribir? ¿Cómo está ambientado tu lugar de trabajo? 

 Aunque sea vergonzante: soy muy desprolijo y siempre todo es un quilombo. Tanto que creo que una de las razones por las que demoré mucho en escribir más “profesionalmente” (pido perdón por las comillas y por el “profesionalmente”) ([vuelvo a pedir perdón, más humildemente ahora]) era porque no tenía escritorio. Un día miré y pensé que si quería escribir no era tan descabellado suponer que debía comprarme un escritorio; lo compré y al toque empecé a escribir la novela.

¿Cómo surgió la idea de la novela “Una muchacha muy bella”?  ¿En qué te basaste para escribirla?

 La idea me asaltó: iba en un Bondi y apareció en mi cabeza “Mi madre era una muchacha muy bella”. Fue así de bruto y de falto de cualquier sofisticación, a partir de esa frase, que era como una musiquita y pensé que iba a convertirse en un poema, empecé a escribir sin parar y sin dudar casi toda la novela. Pero sin dudas esa escritura está sostenida por cosas que venía pensando hacía mucho, por furias que venía sosteniendo hacía mucho.

¿Cuáles son tus autores preferidos?

Pier Paolo Pasolini.

¿Qué autores recomendás leer a tus lectores?

La poesía de Niní Bernardello. Habitaciones, de Emma Barrandeguy. Querido Miguel, de Natalia Guinzbourg.

¿Qué libro famoso te hubiera gustado escribir?

La tragedia de Hamlet, príncipe de Dinamarca, claro.