¡Muchas gracias Mónica por tus respuestas!
¿Cómo empezaste tu carrera como escritora y cuándo?
Fui la escriba de los trabajos prácticos en la escuela y a los quince años comencé a frecuentar talleres literarios y grupos de escritores. Ya en ese entonces le di a la literatura un lugar fundamental en mi vida y emprendí un caminito, una construcción vital basada en la escritura. Ingresé a la carrera de Letras a los dieciséis años y publiqué mi primer libro a los diecinueve.
¿Te inspiró alguien en particular?
Dije que quería ser poeta a los ocho años, por sugerencia de una maestra de un colegio público que había recibido un poema en su honor y nos instó a escribir poesía a todos. Yo la adoraba, quería complacerla, y dediqué mis versos al pizarrón, a la bandera, etc. Mi madre se aprendió de memoria esos textos espantosos y comenzó a buscar un taller literario para mí. En esa época casi no existían. Luego me los busqué yo sola y concurría a dos talleres al mismo tiempo.
¿A qué hora del día te surgen más ideas?
A cualquier hora, pero en general es cuando decido escribir y propicio esa ceremonia.
¿En qué lugar de tu casa te gusta escribir?
En el living, en la mesa.
¿Cómo está ambientado tu lugar de trabajo?
Una biblioteca llena. Nada más.
¿Cómo surgió la idea de “Novela familiar”? ¿En qué te basaste para escribir la historia?
Me tomé un año sabático y me conseguí un departamento de un anciano fallecido. Tuve que ocuparme de vaciarlo y limpiarlo. Empecé a pensar en la idea de la muerte de los padres y comenzaron a surgirme fragmentos poéticos a borbotones. Luego los fotocopié y los ordené hasta que terminaron siendo capítulos como en una novela, pero seguía siendo poesía.
¿Cuáles son tus autores preferidos?
Muchos. César Vallejo, Girondo, Olga Orozco, Alejandra Pizarnik.
¿Qué autores recomendás leer a tus lectores?
Saer, Clarice Lisepctor, poesía de Arnaldo Calveyra, Néstor Perlonguer, Amelia Biaggioni, María del Carmen Colombo y otros.
¿Qué libro famoso te hubiera gustado escribir?
“Grandes esperanzas” de Dickens o “En la masmédula” de Girondo.