10 razones por las que NO amar a Jennifer Lawrence

Publicado el 27 febrero 2013 por Ladyvengeance

Advertencia: no me cae mal Jennifer Lawrence. No me parece mala actriz tampoco, creo que es decente, y que puede crecer mucho, pero que está sobrevalorada. Desde hace un tiempo, está muy de moda, pero desde los Oscar, ha habido una explosión: sus fans se han multiplicado por mil. Solo se habla de ella. Ahora resulta que la chica es una actriz increíble, pero además es graciosa, estupenda, divina, natural... Un prodigio, oye. Y tienes que amarla sí o sí, y hay millones de webs recopilando sus momentazos y motivos por los que hacerte fan. Yo haré lo contrario. No os ofendáis si sois fans, es solo por llevar un poco la contraria, sin mala intención. (Aún así, capaz que anónimos fans de ella me lanzan sus mensajes de odio, que recibiría con mucho amor).
1- ¡Ese Oscar no te pertenece!

Cuando alguien gana un Oscar injusto, hay que odiar ~inmediatamente~a esa persona o a esa película, en vez de odiar más a la Academia, porque los injustos ganadores deberían devolver los premios. Le quitó el Oscar a Emmanuelle Riva, que da vergüenza hasta comparar las dos actuaciones. Da vergüenza que estuvieran al mismo nivel, compitiendo por lo mismo. Y encima, ganó Jennifer Lawrence. Y no solo eso: sino que ganó a Naomi Watts. La maravillosa Noami Watts. Una actriz como la copa de un pino, que no tiene ningún Oscar. Pero J. Law sí. En realidad, ella lo sabe y por eso la veis llorando en la foto. 
2- Falsa Indie

Ella empezó en el cine indie, pero se ha pasado a hacer blockbusters y a estar encantadísima con ser la protegida de la Academia. Dijo que jamás dejaría el indie, porque pertenece a él. Lo dice mientras rueda X-Men, Los juegos del hambre o se hace fotos que reflejan su mundo interior de actriz indie muy dedicada a su profesión. Cuando había gente que no la conocía, muchos vieron esas fotos y dijeron: ¡qué pedazo de actriz! ¡Viva Jennifer Lawrence y el cine indie!
3- Ya no estoy gorda

¿Pero y esas pintas de hacer deporte con esa silueta
perfecta? ¿Pero tú no te hinchabas a bollos sin cuidarte?

Le gusta mucho presumir de su naturalidad, y casi en cada entrevista tiene que mencionar la comida. Ha llegado a decir que no cree que llegue ningún papel que consiga ponerla a dieta, que será "la única actriz" que no de pie a rumores de anorexia, y que es una obesa al lado de las otras chicas de Hollywood. ¿Por qué este empeño en remarcar esa imagen de gorda cuando ha demostrado una y otra vez que no le sobra un gramo de grasa? ¿Por qué tanto empeño en diferenciarse de las otras y vender la imagen de que es la más especial? Hay mucha delgadez en Hollywood, pero eres nueva, nena. ¿Te suena Kate Winslet? Por decir un ejemplo de mujer de verdad. De mujer de verdad que ha tenido que tragar que la llamen gorda, cosa que contigo no han hecho porque estás delgada, por mucho que te empeñes en repetir todo el rato que comes como una gorda. No lo estás, eres delgada, aunque con curvas. Pero no eres la única con curvas. Ahora resulta que desayunas en el McDonald's todos los días. Qué tía tan cool y natural eres.
4- Identidad oculta

Jennifer Lawrence en realidad son dos. No puede ser que esta chica:
Sea la misma persona que esta:
Son gemelas, y se van cambiando, como las Olsen en Padres forzosos. Por eso, algunas veces Jannifer Lawrence está guapísima, y otras parece la típica inglesa con cara de comer bollos y mofletes muy rojos, como una versión de 10 años menos de Bridget Jones. Que no nos engañe más.Quizá la Lawrence come Donuts sea la que da las entrevistas dónde habla tanto de comer...
5- Los juegos del hambre
Para hacer esto, sigue en el indie. Y encima hay varias entregas. ¡Dona tu Oscar a los japoneses y apúntate a Battle Royale! No nos tortures con más sagas teens de mierda, chica indie.

6- Be classy
A la chica le encanta presumir de su espontaneidad y todos aman cómo suelta cualquier cosa por esa boca que Dios le dio. Así, también se desmarca del resto de actrices. Pues no. Eres una actriz de Hollywood: no quiero que seas chabacana. Hollywood es Hollywood, y hay que saber tener clase. ¿Os imagináis el Hollywood clásico con todas las grandes actrices teniendo la misma actitud que ella? Ya no lo añoraríamos tanto. No serían iconos.No tienes por qué ser una aburrida. Me acuerdo de Robert Downey Jr: es divertido, no es correcto. Pero interpreta perfectamente el papel de estrella y de icono mediático, sin caer en la vulgaridad. Ten algo de clase. No vayas con una actitud de campesina. Eres una estrella de Hollywood, no la Juani que ha conseguido triunfar por fin. 
7- J. Lawers
Si se puede odiar a Justin Bieber -entre otras muchas cosas- por las Beliebers, odiemos a Jennifer Lawrence por los J. Lawers (¿de dónde narices ha salido la cutrez de J. Law?). Son unos pesados, y nos saturan al resto, que queremos ver Amour en versión original sin que nos molesten sus gritos histéricos. Además, sois unos peseteros. Había gente que jamás había nombrado a Jennifer Lawrence, y que, tras el Oscar, solo sabe hablar de ella y de su fanatismo. 
8- Tú y tus amigos no moláis: RESPETO A LOS MAYORES
Ya he mencionado su falta de clase, y se ve que se junta con la pandilla maleducada de Hollywood. Porque ella y David O. Russell protagonizaron un momento muy feo en los BAFTA. Cuando el premio fue para Emmuelle Riva, a ella se la veía claramente disgustada (se creerá que con sus 22 años y su papelillo es mejor que Riva), y David O. Russell directamente ponía cara de asco:

Muy maleducados. Un respeto a vuestros mayores.
9- Jack Nicholson le ha mostrado su amor y a mí no (ni a vosotros)
Y ese es motivo suficiente para no amarla, porque yo me merezco más el amor de Jack Nicholson, y seguro que vosotros también (a no ser que seais J. Lawers, que solo os merecéis cajas de Donuts para ser como vuestra ídola):
10- No eres Jim Carrey



No lo eres, así que, ¡deja las muecas! Deja de ponerlas en cualquier ocasión, cuando no lo requiere, solo por seguir interpretando tu papel de chica que hace tonterías porque es super natural y graciosa. No seas tan attention whore, que haces que haya muchos motivos para no amarte.