10 regalos para la canastilla de un recién nacido

Por Y, Además, Mamá @yademasmama

Me encanta hacer regalos, y si tengo tiempo, disfruto mucho planeándolos. Uno de los regalos que más me gusta hacer para dar la bienvenida a un nuevo bebé es una canastilla bien surtida de detalles. Y aunque las hay de todos precios y tamaños, no tienen por qué salir caras si están bien pensadas.

Las canastillas más bonitas son, a mi gusto, las cestas blancas de mimbre que después y pueden servir para guardar las cosas del bebé cerca de su cambiador (pañales, cremas y toallitas…) y que son muy decorativas. A nosotros nos regalaron una redonda preciosa a la que hemos dado muchísimo uso. Pero también hacen su función las cajas de cartón que venden en los bazares estampadas, que se convierten en un almacenamiento extra para la ropa de bebé y que son más económicas. Otra opción son las cajas de madera, como las de frutería, que se pueden pintar y personalizar. O incluso una bandeja de madera a la que queramos dar una segunda vida.

¿Y qué metemos dentro? Las canastillas tradicionales suelen venir con algo de ropa, una manta bordada, un peluche y un chupete o un artículo de aseo para el bebé, pero ¿buscamos otros detalles más personales y originales? Aquí van diez ideas y regalos para hacer, por sí solos o combinados, a un recién nacido:

  1. El peluche o muñeco de toda la vida está bien, pero mejor si no es de pelo y sí de trapillo o de algodón, como éste. Éste de estrella se cuelga en el carrito y es de algodón orgánico. Si es un doudou, seguro que el bebé usará durante más tiempo. Y si el bebé es de Pamplona, es un puntazo regalarle el famoso Ferminico.
  2. Un mordedor o detalle para el bebé. Si es de madera y materiales naturales, mejor que mejor, como estas bolas de colores para explorar o estos mordedores de madera, a muy buen precio, todo de Jugarijugar. Me he quedado prendada del aro mordedor de madera y crochet que ha hecho esta mamá. Otra opción de plástico es el mordedor de caucho inspirado en la jirafa Sophie.
  3. Mejor no regalar un chupete, sobre todo si no sabemos qué opinan los padres sobre esto o si no sabemos si lo usa o de qué tipo prefiere. Si es así, hay chupeteros preciosos que pueden ser una buena opción. Me gustan especialmente éstos de tela.
  4. Un bodie con un mensaje gracioso o con un estampado bonito, y, a poder ser, confeccionado en algodón orgánico. Son buenos ejemplos éste (rebajado) o éste. Un bodie siempre viene bien y es más fácil encajar con el estilo de todos los padres (clásicos, modernos, los anti rosa y azul…)
  5.  Una muselina suave, como las de Aden y Anais o las de mimuselina, con mensajes. Los primeros acaban de sacar hace poco, por cierto, una colección de ropa realizada con su famoso tejido.
  6. Un libro sobre crianza que inspire a los padres. Yo suelo regalar el de Bésame mucho, de Carlos González, que te introduce en una crianza más natural como punto de partida y que resulta muy ameno de leer.
  7. Otro detalle para añadir son unos patucos de crochet como éstos.
  8. ¿Qué tal si incluimos un ‘Vale por…’? Vale por una hora de niñera (el que regala, claro) para que los padres descansen, por llevarse al cine al hijo mayor o simplemente por una comida casera que vuele en tuppers hasta cocina de los nuevos padres. No cuesta nada y puede ser el regalo más valioso de todos. En este post de Papelísimo te explican cómo hacer una divertida chequera con vales.
  9. Un cambiador de paseo como éste nunca viene mal. Para la bolsa del carrito o para tener en casa de los abuelos.
  10. Un álbum del bebé para recordar todo: con fotos de las ecografías y sus primeros meses, anotaciones sobre su comida, sus primeras palabras o sus anécdotas. Éste es de MrWonderful y éste, del Principito, es el que nosotros tenemos en casa.

Por supuesto, no hay que olvidar incluir una nota escrita a mano en una tarjeta o un detalle personal con cariño. Si este listado se te queda corto, en este post tienes más ideas para regalar a un recién nacido, a un niño de un año y de dos.

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