Como siempre digo: lo prometido es deuda. Aquí estoy, con un nuevo 100% novato y esta vez, muy galletil. Hace tiempo os comenté que me había puesto un objetivo de repostería, se trataba de una sencilla receta de galletas de chocolate. Veréis, toda mi vida había SOÑADO con hacer galletas, me daba igual de qué sabor. Y lo cierto es que mi primer intento fue el año pasado, pero quedaron tan desastrosas que no me atreví a asustaros aquí (podéis ver una foto del desastre en este enlace). Pero me armé de paciencia y, después de Reyes, me puse manos a la obra. Me habían regalado una batidora eléctrica y esto ha sido el no va más. ¡Es increíble! Súper fácil, súper rápido y no tienes de qué preocuparte. Os la recomiendo 100%. Además de que costó 50 euros (bastante barata, teniendo en cuenta que hay otras a 100) y es de una marca familiar.
Pero bueno, cambiemos el canal de teletienda para poner el canal cocina y repostería. ¡Manos a la obra!
Chocolate Cookie Cutouts
Esta sencilla receta la saqué de El rincón de Bea, que a su vez, lo sacó de una receta de Marta Stwewart. Lo cierto es que, saliera de donde saliera, están buenísimas y son sencillísimas de preparar. Tenemos que tener en cuenta lo que vamos a necesitar tener a mano y nuestros ingredientes. Coged papel y lápiz y apuntad:
UTENSILIOS QUE VAIS A NECESITAR
-Cortapastas de formas
-Papel para hornear (es un invento maravilloso)
-Rejilla para enfriar las galletas
-Rodillo para amasar la masa
-Batidora eléctrica
INGREDIENTES:
250 gr. harina
100 gr. cacao en polvo
1/4 cucharadita de canela
180 gr. mantequilla sin sal a temperatura ambiente
180 gr. azúcar glass tamizada
1 huevo grande ligeramente batido
1/2 cucharadita de extracto puro de vainilla
Nonpareils de colores
PREPARACIÓN:
1). Primero tamizamos en un bol la harina, el cacao en polvo y la canela (yo creo que la próxima vez que las haga, no le voy a poner canela, así que si queréis, podéis quitársela).
2). Metemos la mantequilla y el azúcar glas en la batidora eléctrica y, a velocidad media, batimos durante 3 minutos (o hasta que quede una mezcla pálida y esponjosa). Si no tenéis batidora a motor, tendréis que hacerlo a mano durante un buen rato.
3). Bajamos la velocidad de la batidora, y le añadimos a la mezcla el extracto de vainilla y un huevo. El huevo hay que agregarlo de tres veces, lentamente, y no agregar más cantidad hasta que no lo haya absorbido la mezcla. Si se os corta, como me pasó a mí la primera vez, lo podéis solucionar con unas cucharaditas de harina y seguís batiendo como si nada.
4). Añadimos a la mezcla la harina tamizada con el cacao y la canela (si habéis decidido ponerla), poco a poco pero sin pausa.
5). Ya tenemos la masa hecha. La divididos en dos y la colocamos cada una entre dos papeles de hornear y la metemos en la nevera durante 2 horas al menos.
6). Cuando ya hayan pasado esas dos horas, precalentamos el horno a 175º.
7). Sacamos las masas de la nevera y con un cortapastas, hacemos las galletas de la forma que queramos. Nosotros las hicimos con varios cortapastas, así que nos quedaron variadas. Sacamos la masa sobrante y la volvemos a amasar, y así hasta que ya no podamos hacer más galletas. Luego, volvemos a enfriar durante 10 minutos.
8). Ya cuando el horno esté listo, las sacamos de la nevera y las espolvoreamos de nonpareils (bolitas de colores).
9). La metemos al horno durante 10 o 15 minutos (echadle un ojo, que cada horno es un mundo).
10). Las sacamos y las dejamos enfriar en una rejilla.
¡Y ya tenemos galletas listas para devorar en 10 segundos! Un proceso taaan largo para acabar en nuestro estómago en un santiamén. Sí, lo sé, es un asco pero es tan divertido, entretenido y genial cocinar galletas. Como os comenté en la elaboración, a mí me da que la próxima vez que las haga, le quitaré la canela. No es que esté mal con ese toque, pero creo que no me gusta demasiado la canela, es muy fuerte y sabe más a canela que a chocolate. El cacao en polvo que usamos era de marca blanca, bastante light, por cierto, así que si tenéis dinero de sobra y queréis que queden aún más rica, mi consejo es que os gastéis unos euros en un buen ColaCao :)
Aquí podéis ver, las galletitas acompañadas de un tazón de leche y de mi moleskine posando :)
Estudiante de letras y otaku apasionado. A parte de leer, jugar a videojuegos y ver películas, adora estudiar y enseñar japonés. Administra Mientras Lees desde hace dos años y su sueño es convertirse en librero. Podéis encontrarlo en su bitácora personal.