¿A quién amarga un buen dulce? Hoy empezamos una sección que vais a ver muy a menudo por estos lares: las reseñas de recetarios, libros de manualidades, etc. ¿Queréis saber cuáles son los mejores libros de repostería del mercado? ¡Aquí estaremos nosotros para aconsejaros! Este jueves es el turno de Cake Pops, de Tamsin Aston y Judith Fertig.
CAKE POPS, de Tamsin Aston y Judith Fertig
60 deliciosas piruletas hechas con bizcocho, galleta, merengue, caramelo y otras bases
Quienes me conocen saben perfectamente que soy un goloso. No por nada mi sueño (2ª sueño, para ser justos) es ser pastelero. Mi hobby es de reciente descubrimiento, pero con él he conocido partes de mí mismo que desconocía poseer. Estoy hablando, por supuesto, de la repostería. Esa misteriosa criatura que todo el mundo descuida. ¿No habéis oído eso de "he hecho todo el almuerzo, pero he encargado el postre"? El postre siempre es el menos mimado de la mesa... pero eso ya se acabó. Al menos para mí. El postre, o sale de mis manos, o no sale de ningún sitio.
Es por eso que hace poco he descubierto un fenómeno muy en auge, los llamados Cake Pops. Los Cake pops nacieron como postres que se creaban a partir de los "desechos" que las pastelerías acumulaban con los días de trabajo. ¿Qué hacemos con toda esta materia prima? ¡Qué desperdicio!, seguro que se decían cada noche. Un día, a algún iluminado se le encendió la bombilla: ¿por qué no mezclamos el bizcochón sobrante con queso, hacemos bolitas con ellas y las cubrimos de chocolate? A esas bolitas tan resueltas, se les llamaron Cake Pops. Son como piruletas de bizcochón, bolas llenas de sabor, dulces y de todo tipo de formas. Pero claro, eso vino después, al principio sólo eran bolitas de chocolate pinchadas en un palo.
Y ahora que ya sabéis lo que es un rico Cake Pop, ¿qué tal si vamos desmigajando este libro que versa sobre ellos? Vamos a ver qué hay en el interior del recetario de Tamsin Aston y Judith Fertig:
En primer lugar, deciros que la edición de Libros Cúpula es una pasada. Así, con las mismas palabras, pa-sa-da. Está editado en tapa dura y con hojas de una alta calidad, similar al papel fotográfico. Todo el libro está impreso a color y podría decirse que es casi todo fotografías deslumbrantes y profesionales sobre las maravillosas recetas que recorren el manual. Cuando abrimos el libro, nos encontramos un índice que cita más de 140 páginas divididas en cuatro capítulos principales:
Capítulo 1 - Por dónde empezar: en este capítulo entraremos de lleno con lo necesario para hacer realidad nuestros sueños más golosos, los ingredientes, los utensilios y la presentación.
Capítulo 2 - Recetas de base: las recetas de base son lo que darán sabor a nuestro cake pop, el libro nos ofrece 10 recetas de base totalmente distintas las unas de las otras.
Capítulo 3 - Decorar: Decorar un Cake pop no es moco de pavo, no es cosa fácil, por eso necesitaremos este apartado para saber qué pasos seguir a la hora de poner presentable a nuestras traviesas bolitas.
Capítulo 4 - ¡Los cake pops!: ¡Un derroche de imaginación página tras página!
¿Pero qué es eso de las recetas de base? ¿Cuántas hay dentro del libro? Bien, las recetas de base son nada más y nada menos que la masa del bizcochón de nuestros cake pops, y en total, en el libro encontraremos 10 recetas, empezando por la de sabor vainilla y terminando por la de sabor toffe, pasando por recetas curiosas como la de merengue, crujiente de caramelo, malvavisco o brownie. Todas para CHUPARSE los dedos. En cada receta de la base, podemos encontrar además pequeños truquitos o consejos para ir variando las recetas e ir creando nuevos sabores a base de la receta original.
Y a la hora de crear los increíbles cake pops de las fotografías que ilustran el largo capítulo 4, nos veremos con el enemigo real: la dificultad máxima de hacer unos cake pops bonitos y graciosos. En cada receta, en este apartado, nos centraremos en cómo conseguir la forma deseada (de balón de rugby, de pelota de playa...), siempre centrado en un tema particular, como los deportes, el invierno, la llegada de un nuevo bebé a la familia... Tendremos dónde elegir modelos y también inspirarnos para crear nuestras propias locuras.
Ahora que ya sabéis qué encontrar en Cake Pops, de Tamsin Aston y Judith Fertig, vamos a valorar los pros y los contras de este recetario, porque aunque todo es divertido, ¡hay que ver qué pesa más en la balanza de la justicia!
A favor
Las ventajas de este libro empiezan desde la edición. Entra por los ojos, esa portada curiosa, lleno de personajes ilustres como el robotijo loco, el dragón invisible o el muñequito de nieve moderno, ¿quién puede negarle algo a esos ojitos de caramelo? Pero los pros no terminan en la superficialidad de las fotos, que son tremendamente profesionales e increíbles (da hambre sólo de mirarlas) sino que el sistema que utilizan las autoras es infalible: hacen que parezca fácil.
Te motivan tanto a crear tus propios cake pops, que terminas creyéndote que puedes hacerlo. ¡Y lo haces! Aunque queden como churros derretidos. Tamsin y Judith le ponen ganas, lo demuestran a lo largo de los capítulos, detallando con minuciosidad todo lo que necesitaréis, los utensilios (con todos sus nombres y fotos de cada uno), los ingredientes para realizar todas las recetas y hasta técnicas para decorar, o cómo mover las manos para realizar las bolitas perfectamente, incluso nos dicen cómo rellenar nuestra manga pastelera. Vamos, que es a prueba de dummies.
Es una ventaja extra contar con una traducción clara y específica, que nos hacen entender rápidamente las recetas. Está todo detallado, además, el apartado de las estampitas de colores, dándonos información esencial como tiempos de cocción o cantidad de cake pops que surgirán de las masas, es tremendamente útil.
En contra
¿Andas corto de dinero...? Pues entonces aléjate de este libro, como si escaparas de un incendio, porque en eso se puede convertir tu vida si te compras este libro y no tienes suficiente economía como para practicar todo lo que sale en él. Y es que sí, el libro es asequible, 14,00 euros cuesta convertirte en un experto repostero de cake pops... en teoría, claro.
Otro de sus defectos, aparte de algún gazapo técnico (como un utensilio marcado pero no descrito), es no especificar cuáles son las recetas más fáciles o más elaboradas. Puedes pensar que sólo con verlos ya puedes adivinar su dificultad pero... habría sido interesante poder contar con un apartado para manazas principiantes como yo.
Conclusión
Cake Pops, de Tamsin Aston y Judith Fertig es un libro de recetas originales, divertido y muy bien editado. Hará las delicias de los más pequeños de la casa, que se divertirán como enanos creando estos monstruos tan rebeldes y también será la obsesión de los iniciados a la moda de la repostería creativa. Los Cake Pops han llegado para quedarse y, si tu bolsillo te lo permite, hacerte con este libro es una buena opción para comenzar en un mundo apasionante, lleno de colores, sabores y formas nunca antes vistas.
En conclusión os puedo decir que, aunque sea sólo para adornar en vuestra repisa gastronómica, Cake Pops es un libro que vale la pena tener en casa. No sólo por lo dicho, sino también porque el nivel de calidad de las recetas es bastante alto y la variedad y buen gusto es de agradecer. Si sois aficionados a la nueva repostería, tenéis que probarlo alguna vez. Y si no os interesa el baking... ¿qué hacéis leyendo esto?
Escrito por Daichan
Daichan es un chico aficionado a la lectura desde que es joven, aunque confiesa haberse encontrado con serias dificultades para engancharse al bello arte de leer. Está estudiando Comercio Internacional y Psicología. Es el marido de Kanon y co-fundador de Mientras Lees.