11 lecciones sobre el manejo del dinero “enseña finanzas a tus hijos”

Los buenos hábitos económicos se aprenden desde la infancia. Por ello es importante proporcionar a los niños las mejores herramientas para que hagan un buen manejo de su dinero.
1; Incúlcales el uso del dinero. A los niños se les debe enseñar su manejo a partir de los cinco o seis años, o antes si ya conocen el valor de los números y realizan operaciones matemáticas esenciales.
2; Que administren su mesada. La mesada es una de las mejores formas de enseñar a los niños l que significa administrar su propio dinero. Es aconsejable que se les dé el dinero en forma periódica.
3; Aprender es divertido. Para algunos niños, cuando perciben al aprendizaje como una obligación, suelen administrarlo con muchas dificultades e incluso pueden verlo como rechazo. Por ello es importante tratar de hacerlo lo más atractivo posible: crear juegos que incluyan conocimientos relacionados con el dinero y ponerlos a prueba.
4; El dinero no es todo. Es importante que quede claro que “el dinero es un medio y no un fin”. Si se maneja correctamente es posible alcanzar las metas financieras que cualquier persona anhela para vivir con tranquilidad (estudiar un posgrado, comprar una casa, ir de vacaciones etc.) También es importante establecer que el valor como personas, su autoestima y su felicidad no dependen de la cantidad de dinero que se llegue acumular.
5; Tener objetivos bien definidos. Para evitar que los niños caigan en la avaricia y que sólo acumulen dinero sin sentido, hay que ayudarles a establecer qué quieren adquirir con el ahorro de sus mesadas y en cuánto tiempo piensan lograrlo. Es importante ayudarlos a dimensionar sus alcances y limitaciones.
6; Empujarlos a que tomen decisiones. Los niños tienen que decidir sus metas (adquirir un dulce, un celular, etc. )la cantidad y el plazo que destinaran para su objetivo. Para ello es mejor que estén supervisado por un adulto, porque es necesario que alguien les vaya mostrando el camino y los limites.
7; Que no repliquen los errores de los padres. Lamentablemente, los hijos suelen replicarse los hábitos de comportamiento de los padres, en todos los ámbitos de la vida. Si el hijo observo que sus papas vivieron son deudas y con problemas de liquidez, es muy probable que él haga lo mismo. Hay que romper esos patrones de conducta y transmitir conocimientos y herramientas para que los hijos no cometan los mismos errores.
8; Que sepan de donde proviene el dinero. Deben tener claro que los ingresos son el resultado del trabajo y el esfuerzo. Si ven que el dinero sólo se obtiene del cajero automático podrían pensar que el dinero así se consigue. Se les debe explicar que es el resultado de un trabajo arduo. Decirles que para recibir el dinero que tienen en sus manos, hay que ir a trabajar muchas horas y trasladarse a sus centros de trabajo.
9; Incrementa sus ingresos. Así como es importante destinar parte de sus ingresos al ahorro, también se les debe inculcar incrementarlos. Es decir, que no sólo dependan del “domingo” que les dan sus papás, sino enseñarles que hay formas  de aumentarlo. Por ejemplo, decirle al pequeño que lea un libro, o cuento, y hacerle unas preguntas. Si acierta a todas, entonces se le compensará con $20 pesos, por ejemplo, de lo contrario la gratificación seria nula eso les enseña a que no solo el trabajo físico deja gratificaciones, sino también el intelectual.
10; Deja que comentan errores. Posiblemente después de un arduo esfuerzo, el pequeño no pudo alcanzar la meta que se había propuesto cuando comenzó a ahorrar. Hay que ayudarlos a que no se decepcionen y que ese “aparente” fracaso no los haga olvidarse del ahorro. Los errores forman parte del proceso natural de la vida y gracias a ellos no sólo se conocen los fracasos, sino también los éxitos.
11; No deben ser individualistas. Hay que enseñarles a compartir y que no sólo ahorren para ellos. Sus ahorros pueden servir para ayudar a sus papás a comprar un par de tenis o para el regalo de los abuelos o para un material de la escuela. Que gocen invitando a sus primos, hermanos o padres un helado, por ejemplo.
También te recomiendo leer el libro Niño Rico Niño Listo de Robert Kiyosaki, en donde conoceras mas sobre este tema. 
Alberto Ibarra