Hoy los medios nos recuerdan (incluso en Google) que Agatha Christie nació hace 120 años. Y a mí eso me ha hecho acordarme de lo mucho que disfruté de sus novelas cuando era un niño. Sentía una especie de emoción cada vez que abría uno de esos libros de papel duro y cubiertas blandas. Leí Tres ratones ciegos, Diez negritos, El gato entre las palomas, El asesino de la guía de ferrocarriles, La señora McGinty ha muerto, Los cuatro grandes... A tanto llegó mi obsesión que intenté escribir una novelita parecida, y sólo era un crío. Escribí bastantes páginas, en una máquina eléctrica prestada, y hasta dibujé las caras de mis personajes. Las novelas de Christie siguen teniendo su influencia en el cine, el teatro y la literatura. Y creó a dos detectives ya míticos: Hércules Poirot y la señorita Marple.
Hoy los medios nos recuerdan (incluso en Google) que Agatha Christie nació hace 120 años. Y a mí eso me ha hecho acordarme de lo mucho que disfruté de sus novelas cuando era un niño. Sentía una especie de emoción cada vez que abría uno de esos libros de papel duro y cubiertas blandas. Leí Tres ratones ciegos, Diez negritos, El gato entre las palomas, El asesino de la guía de ferrocarriles, La señora McGinty ha muerto, Los cuatro grandes... A tanto llegó mi obsesión que intenté escribir una novelita parecida, y sólo era un crío. Escribí bastantes páginas, en una máquina eléctrica prestada, y hasta dibujé las caras de mis personajes. Las novelas de Christie siguen teniendo su influencia en el cine, el teatro y la literatura. Y creó a dos detectives ya míticos: Hércules Poirot y la señorita Marple.