[12×18] Los regalos corporativos como herramienta de fidelización para empleados

Habitualmente relacionamos las estrategias de fidelización con acciones destinadas únicamente a clientes, pero no debemos olvidar que existe otro colectivo con el que es muy importante establecer una relación de estabilidad y comodidad, como son los empleados.

La felicidad en el trabajo es un factor fundamental a la hora de desarrollar correctamente cualquier actividad laboral. Tener a un empleado contento con su trabajo puede suponer una mejora considerable tanto en su rendimiento como en el de sus compañeros. Por el contrario, un trabajador infeliz puede llegar a influenciar negativamente al resto de la plantilla, causando un mal clima laboral.

De acuerdo con un estudio realizado por Randstad se estima que, cada día, más de un millón de personas deja de acudir a su puesto de trabajo y un 26,4% lo hace sin estar de baja. Las razones principales de estas ausencias son el descontento salarial, el trabajo a realizar y la falta de reconocimiento por parte de la empresa.

En este año en que las malas noticias se han ido sucediendo, el descontentamiento laboral se ha visto incrementado por las aplicaciones masivas de ERTE (Expedientes de Regulación Temporal de Empleo). Y es que muchos ciudadanos no han podido entender cómo empresas con grandes beneficios también han aplicado estas medidas (quién sabe si por oportunismo o por necesidad).

En este contexto, son muchas las compañías que tienen (o deberían tener) la obligación moral de volver a fidelizar a sus propios empleados ahora que parece que el fin de la pandemia empieza a ser visible. Para ello existen muchas acciones que se pueden llevar a cabo, aunque la que hoy nos ocupa es la de realizar regalos corporativos.

Ahora que se acercan las fechas navideñas y que no se podrán celebrar las típicas cenas de empresa, este tipo de regalos se postulan, más allá de los lotes de navidad, como una gran alternativa para tener un detalle con los trabajadores.

Pero, ¿cuál es su efecto? Lo cierto es que estos obsequios generan una reacción en cadena muy positiva para todos los agentes implicados. Por un lado, se produce una sensación de reconocimiento, lo que afecta positivamente al estado de ánimo y, sin ser consciente de ello, se mejora el desempeño de las tareas dando lugar a un aumento de la productividad.

En referencia a la variedad de opciones para regalar, las posibilidades son prácticamente infinitas y, sin lugar a dudas, existen opciones adaptadas para cada caso en particular, tanto económica como funcionalmente. Desde artículos útiles para el desarrollo laboral, como agendas, libretas o bolígrafos, hasta regalos tecnológicos y gadgets llamativos, como cargadores inalámbricos para teléfonos u auriculares con bluetooth, entre otros. Una de las empresas españolas que comercializa este tipo de regalos es Moloon.

Otra opción para sorprender es a través de los famosos "welcome pack". Consisten en un surtido de diferentes regalos los cuales llevan el logotipo de la marca y suelen estar relacionados con la actividad de la empresa. Funcionan muy bien tanto para nuevas incorporaciones como para aquellos empleados más veteranos, pues pueden aportar una motivación añadida para los primeros y suponer un extra de confianza para los segundos.

Con este tipo de acciones conseguiremos mantener la motivación en los empleados y, consecuentemente, que estén más comprometidos con la empresa. Eso repercutirá en un aumento de la productividad, lo que puede llegar a notarse en el rendimiento del negocio. Sin duda alguna, una acción win-win.