Poco puedo decir nuevo de esta película, que no se haya dicho ya, lo que si que tengo claro, es que falla en varios grandes aspectos y que ha estado muy sobrevalorada, a la hora de acudir a los Oscars.
La película aún así, se mantiene, sobretodo gracias a una espectacular actuación de James Franco, que bien se podría decir que esta a la altura de Ryan Reynolds en Buried, el problema es que esta última película, es mucho mejor que 127 horas. Franco se empeña, y hace su personaje completamente creíble, y es gracias a él que de vez en cuando podemos darnos cuenta de lo que de verdad tuvo que sufrir Ralston, quedando atrapado en la roca.
En definitiva, una película que recomiendo, aunque si eres de estomago sensible, quizá tendrás que cerrar los ojos en cierta escena de la película, pero que dura unos pocos minutos.