14 de Octubre, el día que saqué el abrigo del armario

Por Saraytg @Desdemilanblog

Temperaturas de esta semana

Hacía días que mis mayores temores dejaban de ser temores para convertirse en miedo verdadero y realidad. Había intentado negar la mayor, no rendirme antes las evidencias, y seguir luchando contra la situación que se avecinaba convencida de que con mi gabardina aguantaría toda la estación. Sí amigos, me negaba a sacar el abrigo del armario. Era ese abrigo que mi madre me había traído en su visita por si el tiempo no me daba tregua, ese abrigo que casi en mayo olvidé (sí, casi en mayo, es decir hace tan sólo 5 meses que me lo quité porque nunca hacía suficientemente bueno como para disfrutar de la primavera que no llegó a existir).

Hoy, 14 de octubre de 2013, en una mañana nublada y muy fría en Milán, después de ver la temperatura que haría durante el día en el móvil y después de percatarme que si comenzábamos la mañana con unos gélidos 9 grados la máxima no superaría los 14, fue el momento de sacar mi abrigo del armario. No pude dejarlo para más adelante. No pude vivir la ilusión de un otoño de temperaturas suaves, eso ya ha dejado de existir…

Queriendo ya comprar el árbol de Navidad

Con mi querido amigo, mi abrigo de invierno, saqué mi carita fuera del portal hacia la calle y una bofetada de aire de hielo me empujó hacian adentro, como si me estuviera avisando: “Noooo… no vayas… no salgas… ¿no ves que te congelarás?”. Pero claro, el deber me llamaba… Sólo había una posibilidad: echarme una carrera hasta la estación de tren para entrar en calor a base de movimiento.

Oficialmente doy por comenzado muy a mi pesar el invierno milanés. Pero si esto es malo, lo peor estará por llegar. Esto sólo es octubre… veremos cómo sobrevivir en diciembre en la ciudad. ¡Pero si es que ya tengo ganas de ir a por el árbol de Navidad y hacer sopas!! ¿Qué vamos a dejar para más adelante?!!! Ya ha empezado la “Operación Winterfell“.