- Se prescinde de la utilización de productos químicos tóxicos.
- Existe un perfecto sistema de trazabilidad.
- Combina las mejores prácticas ambientales con la preservación de recursos naturales aplicando una serie de normas y reglamentos europeos.
- Los alimentos son obtenidos sin sustancias derivadas y a través de procesos naturales.
- Máximo sabor y calidad en los productos.
- Los productos mantienen la integridad ecológica, están identificados y certificados.
- Contribuye a la protección del medio ambiente y al desarrollo rural.
- Mitiga y reduce el cambio climático.
- Menor consumo energético.
- Aumenta la importancia de mercados locales y los canales cortos de comercialización.
- Fomenta la biodiversidad y mejora el hábitat.
- Evita los organismos modificados genéticamente (OMG), dependientes de recursos no renovables.
- Reducen los costes de producción.
- Los productores y agricultores obtienen una renta digna.
- Se fomenta la diversificación de los ingresos, la potenciación de los recursos disponibles y el empleo.