Carola Chávez.
Por ahí he escuchado varias veces, demasiadas veces, a personas dolartodayzadas afirmando que el salario mínimo en Venezuela es de 17 dólares. Lo dicen con una convicción estremecedora. Es como si su cerebro funcionara en dos planos, una especie de bipolaridad financiera que los mantiene en la amargura de una irrealidad aplastante donde siempre salimos perdiendo.
Si en verdad, cómo dicen, el salario mínimo es de 17 dólares -today-, entonces ese salario es mágico y compra mucho porque en el mundo real, donde se vive con dólares reales, 17 de estos no alcanzan ni para ir al cine y comerse unas cotufas.
Sobre esos cálculos me fui a hacer compras virtuales a Miami, traduciendo todo a bolívares y descubrí unas cosas impresionantes: Tomarse un café en barra cuesta $2,85, es decir que si las cosas son como estos dicen que son, ese café cuesta Bs. 1.700 aproximadamente. Pongamos que quieres acompañar el cafecito con un croissant simple, pues, debes agregar otros Bs. 1.500; Un desayunito para uno en la panadería a 3.200 bolos.
Si después del café te da por ir a hacer mercado, la cosa se pone más oscura. Compremos pan de sanduche a $1,50 el paquete, que serían entonces Bs. 900; arroz a $1,40, Bs.840 el kilo; huevos a $2,50 la docena, Bs. 1,500; Leche a $0,90, Bs. 540 el litro; un yogurt a un dólar, 600 bolos el potecito; y luego los tomates a $3,75 el kilo, Bs 2.362; Naranjas a 800 bolos por kilo, cabures a más o menos lo mismo… En el mostrador de la carne se me pone la carne de gallina: Molida a $8,50, Bs. 5.100 el kilo; lomito -Oh my God!- a $21 el kilo, es decir, ¡12.600 bolívares!, como para hacer una parrila, pues. Y el pollo entero, que haría a pedazos este presupuesto, a $9.00, o sea, 5.400 bolívares.
Abrumado, sales del mercado y tomas el trasporte público a $1.00 el boleto, sería subir al Metro o a una camionetica por 600 bolívares. Y te vas a cine, porque te lo mereces, para algo trabajas… Compras una entrada por $8,00 es decir, Bs 4.800, y quieres cotufas y refrescos y $12,25, Bs.7.350, el combo pequeño, cien bolívares menos que ese sueldo mínimo básico que calculan mal los malos calculadores.
La fantasía del séptimo arte no dura todo el día, siempre hay que volver a casa. Una vivienda majunche que, alquilada, puede costar $600, Bs. 360.000 mensuales, o a una modesta vivienda hipotecada a $1000, Bs. 600.000 mensuales, a la que habría que sumarle el costo del seguro obligatorio que ronda los $160, Bs.96.000… Y no olvidemos agregar unos pichirrísimos cien dólares más para pagar por los servicios de luz y agua a 60,000 bolos, ta’ barato dame dos.
Sacando estas cuentas cualquiera que crea que el sueldo mínimo es de diecisiete dólares, podría enfermarse, pero enfermarse tiene un precio y según esos cálculos sería de aproximadamente $400 mensuales por un seguro de salud, es decir, 240.000 bolos más.
Sumemos y hagamos ¡Plop!
Pero siempre habrá Nutella, que cuesta dos dólares el pote y que en Venezuela no te la venden a 1.200 bolos sino a 4 mil, y siempre habrá un pésimo calculador que levante la voz indignado y pregunte a modo de profundísimo y afilado argumento político ¿Cómo hace alguien que gana sueldo mínimo para comprarse una Nutella?
En fin, que Dólar Today no solo ha ocasionado un criminal daño financiero, tal como hoy -¡por fin!-, dos años después de que los chavistas lo denunciáramos, lo afirman también banqueros y empresarios, sino que también ha causado severos daños cerebrales en el sector “decente y pensante” de nuestra sociedad.