181.- Esta es la verdadera sociedad en la que vivimos

Publicado el 15 mayo 2012 por Javiersoriaj

Vivo en una sociedad marcada por el individualismo más feroz. Vivo en una sociedad donde vamos perdiendo hasta los sentimientos más básicos de eso que cada vez más eufemísticamente llamamos “humanidad”, cualidad reservada en la mayoría de los casos a los animales no racionales, y de escasa presencia entre los que a sí mismos nos llamamos racionales y “humanos”. 
Vivo en una sociedad donde yo soy parte de la sociedad, y así, me voy cogiendo cada vez más asco, y con ello a la sociedad que me hace y, cada vez más, poderes políticos y financieros mediante, me deshace.
Recojo un texto de Nega, de Los Chicos del Maíz, que pone de manifiesto en lo que nos han convertido, en lo que nos hemos convertido, y que a su vez recoje Javier Ortiz en su blog Pedradas (http://www.javierortiz.net/voz/iturri/lo-que-acaba-de-ocurrir-en-mercadona-es-terrible-e-ilustra-muy-bien-el-estado-de-las-cosas):

«Lo que acaba de ocurrir en Mercadona es terrible e ilustra muy bien el estado de las cosas»

“En las colas un hombre de mediana edad, sin mala pinta, un padre de familia, con su carrito verde pequeño con dos cartones de leche y varios paquetes de pasta, suplicando por favor una ayuda para pagar unos productos de primera necesidad, no más de cuatro euros seguro. Se me para el corazón ante una situación tan humillante, un hombre hecho y derecho pidiendo para llevar dos bolsitas de macarrones, tomate y leche a su casa. Le comento a los de mi alrededor que si ponemos 50 céntimos cada uno el hombre podrá pagar la cuenta y sus hijos al menos comerán unos días. Hacen como que no existo hasta que digo un ‘me cago en Dios’ a viva voz y como puedo, intento explicar que esto nos puede pasar a cualquier de nosotros cualquier día. Más silencio. Tan solo una viejita (de las que habrá pasado hambre en la posguerra) y sin decir nada, colabora con un euro, yo pongo tres. El hombre, avergonzado, coge el dinero. Más silencio incómodo en las colas y en las cajas.”

“Es la victoria de la ideología dominante: no hay pobres, hay “loosers”, perdedores…. Inadaptados que no aprovecharon las oportunidades que la mano invisible del mercado puso a su alcance. La pobreza ya no tiene una explicación social y política; responde a la pereza o incompetencia del sujeto. Y nos lo hemos comido con patatas mientras veíamos Sálvame y celebrábamos la victoria de España en el mundial.”

“Mientras, en Grecia, se organizan comedores y huertos populares al margen de las instituciones para cubrir las primeras necesidades, pero algunos sólo ven disturbios”

(Nega, de LCDM)