Valeria está para comérsela, ¿qué voy a decir yo? Habla, habla, habla, toooooodo el día, incluso ha empezado a cantar, nosotros empezamos la canción y ella dice la última sílaba de cada frase... ya se sabé la de Pimpón, El barquito chiquitito, Debajo de un botón...
Sigue siendo súper fan de Elmo, no quiere ver nada en la tv que no sea eso, si le pones otra cosa, llora mientras dice "Eeeemooooooo" hasta que se lo pones... y capítulos muy concretos: los que tienen canciones, si no, se aburre.
Cada vez le gusta más ver cuentos, ella misma elige los que quiere que le cuentes y tiene sus favoritos, ahora mismo son El Pollo Pepe (que lo tiene destrozado, gracias, María, por el regalo), que se lo sabe de memoria, uno de Kipper que sacamos de la biblioteca, 10 pequeñas mariquitas, que era de mis hermanas y ¿Puedo mirar tu pañal?. Ha descubierto a Peppa Pig, tiene un cuento y un cd con canciones en inglés y lo pide:"Papí!"
El libro de las mariquitas le gusta porque últimamente le llaman muchísimo la atención los números. Ya reconoce solita el uno, el dos y el cinco (éste último gracias a Elmo). Tiene imanes en la nevera de los números, y le encanta jugar con ellos. También se fija mucho en los números en los ascensores.
Está súper simpática, saluda a todo el mundo, le da igual no conocerlos, ir con ella al supermercado o en el autobús es un show, porque va diciendo Hola y adiós a todo el mundo, no podemos avanzar dos metros sin que comprometa a alguien para que la salude. El otro día volvíamos ella y yo de hacer la compra, iba andando de la mano, nos encontramos con un vecino que también volvía a casa y le dijo: "mano"; le agarró la mano y ahí que fuimos los tres al portal juntitos. En fin...
También ha aprendido a dar besos, dice: "mmmmmmuaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa!". Comestible total.
Sigue durmiendo en su cama de lo más feliz. Es más, algún día la hemos llevado a la nuestra porque tenía mocos y ha vuelto a lo mismo de ponerse a brincar y saltar, así que de vuelta a su cama y se queda tan tranquila. Le encanta estar ahí, la verdad, le hace muchísima ilusión su cama. Yo lo voy llevando, aunque la sigo echando muuucho de menos por las noches, pero en fin, hay que respetar sus decisiones.
Le han salido dos muelas más, así que ya tiene 8 dientes y 4 muelas. Además, ha empezado a elegir lo que se pone (yo le doy dos o tres opciones). Le encanta verse en el espejo con cada modelito y a veces me pide que le ponga las coletas y el collar, ay, la que nos espera...
Ya no come en la trona, se ponía de los nervios, ahora come en su sillita de mimbre, a nuestro lado, comemos los tres juntos viendo Elmo... ellam no tiene muchas normas, pero una que es indiscutible es que se come sentado... así que comemos los tres a la vez, con Elmo puesto, si se levanta, le damos al pause y se para el capítulo y ella ya sabe que es porque se ha levantado, así que se vuelve a sentar... espero, con el tiempo poder prescindir de Elmo, pero de momento, nos funciona así. También recoge su plato de la mesa y lo lleva a la cocina. Y está empezando a colaborar a la hora de recoger sus juguetes por las noches, me parece importante que lo haga.
En el lado negativo... tiene bastantes rabietas y muy poca tolerancia a la frustración, si algo no le sale o le dices que no haga algo, se enfada muchísimo y se tira al suelo gritando y llorando... cuando se pone así, intentamos distraerla diciéndole que nos acompañe a hacer tal o cual cosa, pero sin acercarnos mucho, porque si la tocamos o la queremos coger se enfada más y es peor, así que simplemente le hablamos tranquilamente y al cabo de unos segundos (o minutos), se levanta y se incorpora a lo que sea que hagamos o bien ya nos pide que la cojamos en brazos...
Lo más complicado es lidiar con su genio, es muy, muy terca y además es demasiado traviesa, a veces estamos en el parque y alucino porque parece una kamikaze al lado del resto de niños... pero bueno, aparentemente su padre era igual, y no le ha ido nada mal, así que paciencia...