Pues ya ven, aunque mis grupos favoritos hicieron acto de presencia en mi vida en mis días de instituto, a quién recuerdo con más fuerza en aquella etapa fue a estas 2 bandas que he mencionado en la primera frase del artículo de hoy. Y claro, he tendido a buscar los motivos por los que es así. Creo que básicamente fue que en la 2ª mitad de los años noventa tanto Everything But The Girl, como Garbage, tuvieron un gran éxito y bastante repercusión mediática. Otro aspecto es que a estos grupos, salvo en puntuales ocasiones, no he vuelto a acceder con demasiada euforia a posteriori, como si hago periódicamente con Depeche Mode, The Smiths o The Cure.
Y por ello es que hoy he considerado un buen día para retomar a Garbage y el que fuera su glorioso y estupendo 2º trabajo, aquel “Version 2.0” editado en verano de 1998. Ya hice lo mismo con Everything But The Girl hace justo un año con su “Temperamental” y ahora es el turno de que Shirley Manson y sus muchachos pasen por el blog. Aunque quien más destaca dentro del núcleo de la banda es la citada vocalista, los otros tres componentes, Butch Vig a la batería, Steve Marker al bajo y Duke Erikson a los teclados y guitarra, son muy importantes de cara a afirmar que a finales de los noventa representaron la máquina sonora más potente e interesante, gracias a sus matices electrónicos, dentro del territorio del pop accesible internacional.
Garbage se había postulado con su disco de inicio de mismo nombre como una banda de rock/pop, de sonido sucio, agresivo y algo lúgubre. La grave voz de su vocalista Shirley Manson jugaba un papel muy importante en esa percepción y la textura de canciones como “Wow” o “Only happy when it rains” demostraban claramente el carácter sonoro de esta formación. Fue un prometedor disco de estreno dentro de un panorama musical mundial algo revuelto, en el que el brit pop empezaba a resquebrajarse tras el punto álgido de 1995. Había que recolocarse pues y aprovechar los huecos del mercado.
Llegaba 1998 y Garbage retomaba el pulso a la actividad con su 2ª entrega, simplemente titulada “Version 2.0”. Y en efecto se trataba de una nueva “versión”, ya que el grupo abordaba caminos más cercanos al pop en este disco, aunque también hubiera un buen porcentaje de canciones al estilo de su disco de debut, con ese oscurantismo, melancólico y a ratos depresivo que Shirley sabía transmitir correctamente. Ahora lo veremos.
“Temptation waits” muestra ese camino pop más marcado en el estribillo de la canción. Salvo alguna parte de la prosa y la distorsión de las guitarras, se ve un carácter más pop y una evolución respecto al sonido del disco de debut. Sin embargo, el grupo a través de sus 2 primeros singles intentó no dejar tan perdidos a los seguidores. Precisamente nos encontramos ahora al segundo sencillo, la peculiar “I think I’m paranoid” que está más acorde con los sonidos supuestos a Garbage, aunque en esta ocasión la intensidad está en el estribillo. Hay partes más accesibles, como el comienzo de la canción, pero la contundencia de la guitarra y Shirley suenan con más fuerza que nunca cuando deciden romper en la canción. Y la verdad es que los singles fueron los que marcaron el ritmo del devenir de “Version 2.0”, ya que el 3er. y cuarto sencillo serían los que mostraran a Garbage como un grupo más accesible. Después de “I think I’m paranoid” se presenta la ligera “When I grow up”, que fue un gran éxito en su día, a pesar de su posición como 4º sencillo. De hecho fue la canción con la que Garbage confirmarían su popularidad en nuestro país tras la aproximación de accesibilidad de “Special” que fue el 3er. single. En los días de promoción de esta canción, fue cuando Garbage vinieron de gira a La Riviera y hasta formó parte de alguna campaña publicitaria de la época. El tarareo, y la fuerte melodía pop hacen de “When I grow up” un tema fuertemente pegadizo y comercial. Me gusta mucho, la verdad. Es un subidón de adrenalina pop estupendo, sobre todo en su parte final con Shirley alcanzando unos registros vocales muy interesantes en la repetición de la frase “lo hice todo trizas y lo dejé marchar”. “Medication” aborda la parte lenta, lánguida y relajada del disco, con esa suave melancolía que Garbage aborda de vez en cuando. Nos vamos a encontrar algún que otro ejemplo interesante de este estilo en la obra, como veremos en “You look so fine”, pero ya en sí “Medication” a ratos es estupenda como por ejemplo en esa relajada sección en la que Manson dice “y todavía puedes llamarme co-dependiente, de alguna forma me echas la culpa a mi”. “Special” fue la canción que terminó de acercarme a Garbage, ya que el siniestro clip de “Push it” y “I think I’m paranoid” de primeras no me convencieron. Aquí, la ayuda promocional en forma de video vino de la mano de una especie de batalla aérea futurista entre los componentes de la banda, perfecto para una canción con tanto ritmo y velocidad. El estribillo tiene un fortísimo gancho sonoro y se trata de una canción pop, con la base sonora potente de Garbage que comenzó a abrir el camino a las grandes masas a un grupo que a priori asustaba en cierta medida. Garbage tiene mucho que agradecer a “Special”. Después de este momento pop se hace algo agreste la atropellada “Hammering in my head” que vuelve por los derroteros más contundentes de Garbage, mezclando guitarras con electrónica y con distorsiones vocales digitales de la voz de Shirley (algo muy marca de la casa en este disco). También hay lugar para alguna parte más calmada e incluso hipnótica que sirve como descanso en mitad de la marea de fuerza de esta pista. Gracias a esta canción y la posterior presencia del primer single extraído “Push it”, “Versión 2.0” coge el ritmo sonoro de origen del grupo, dejando el sonido pop durante un rato.
Para todos los que recordamos aquella época, “Versión 2.0” fue uno de los discos más celebrados de aquel periodo entre verano de 1998 y la primera mitad de 1999. Recuerdo que en mi grupo de amigos de instituto gustó bastante (gracias a ellos conseguí la copia de cd original en casette) y hasta alguno de ellos se declaraba como gran fan del grupo. Aunque anduvo presente en mi vida cotidiana toda aquella temporada 98/99, fue principalmente en la 1ª mitad de 1999 cuando le presté más atención, a la par que me iba sumergiendo en discos como “Hatful Of Hollow” de The Smiths.
Situó a Garbage como una de las promesas de la música del momento, gracias a que el grupo había suavizado su propuesta gracias a su 3er. y 4º single del disco. Para no perder la esencia oscura, “You’re so fine” fue editado como 6º single (o al menos se le dió promoción comercial, con la grabación de un delicado, precioso y gélido videoclip) y previamente fue “The trick is to keep breathing” quien siguió con la exitosa etapa promocional de este álbum. La portada es muy sencilla, con un fondo cuadriculado y rojo, sobre el cual se dispone el nombre del grupo y del álbum.
Tal fue la repercusión que alcanzó Garbage, que hasta fueron escogidos como la banda encargada de la nueva canción de la siguiente entrega de la saga de James Bond, en los días de mi no muy querido Pierce Brosnan, “El Mundo Nunca Es Suficiente”, con un tema fastuoso y algo oscuro, que sin desvirtuar el sonido de los temas Bond, llevaba el toque genuino de Garbage.
Y digamos que Garbage no terminó de rematar la jugada y el resto de sus entregas a partir de “Version 2.0”, además de ser escasas, también son algo flojas. Por ejemplo, su siguiente disco “Beautiful Garbage” no le llega ni a la altura del betún a este “Versión 2.0”; no hay más que escuchar la discretita “Androgyny”, que es un single falto de la emoción del pop de canciones como “Special” o del sonido duro de Garbage de canciones como “Only happy when it rains”.
El grupo en la pasada década a ratos pareció estar disuelto, luego retornó con el tampoco acertado “Bleed like me” y se oyen rumores de nuevas grabaciones en breve. Veremos si Shirley Manson y sus compañeros retoman el camino de las buenas canciones que compusieron para la estupenda obra que les proponemos para esta semana, ya que desde “Version 2.0” estimo que perdieron el toque. Espero que les guste el disco. A mi, volver a escucharlo, me ha trasladado en el tiempo 12 años atrás a unos días que recuerdo con especial cariño; supongo que en ello influirá que la temida selectividad de aquella temporada, tuvo un final feliz y notable para mi.