Matias Ballini nació futbolísiticamente en Villa Dálmine, dónde debutó en 2004 cuando el “Violeta” jugaba en Primera C. A fines de 2007 llegó a Central donde realizó las inferiores, siendo campeón en la 4ta división con Manfredi como técnico. Sus buenas actuaciones lo llevaron a jugar con la reserva al año siguiente en la que consiguió un subcampeonato. Su primera pretemporada con el primer equipo la realizó en el 2009 aunque su debut no llegó sino hasta el Clausura 2010.
Su primer partido como titular en el equipo inicial se produjo el 12 de febrero del 2010 frente a Chacarita Juniors. Antes de su debut como titular, ya había jugado algunos minutos ingresando desde el banco frente a Racing, Tigre y River. Durante el Clausura 2010 disputó 14 partidos, 9 de ellos como titular.
Lamentablemente el 28 de abril de 2010 el mediocampista sufrió la fractura de su peroné de la pierna derecha. La lesión se produjo en la práctica luego de trabar una pelota con un compañero. Dicha lesión lo margino de las canchas por un plazo de entre 3 y 4 meses, por lo que Matías no llegó a jugar con Merlo como DT pero si pudo estar a las órdenes de Rivoira para poder disputar parte del torneo Nacional B.
Durante la Temporada 2010-2011, disputó 17 encuentros siendo titular en 12 de ellos. Convirtió un gol y recibió 4 tarjetas amarillas y una roja. Su desempeño durante dicha temporada alternó buenas y malas actuaciones lo que le impidió convertirse en el mediocampista de recuperación que el equipo necesitaba.
Para la temporada 2011-2012 de la B Nacional, Matías tiene un lugar asegurado en el plantel profesional pero simpre corriendo desde atras en la consideración del DT, siendo la cuarta o quinta opción en su puesto.
Tal es así que sólo pudo estar presente en dos partidos durante el primer semestre y, dado que no tuvo buenas actuaciones (incluso siendo expulsado ante Huracán a los pocos minutos de arrancado el encuentro), se decide prestarlo en Diciembre del 2011 al Girona de la segunda división española por un año y medio. En el conjunto español disputa 7 encuentros. Al no colmar las expectativas de los españoles, deciden rescindir su contrato.
Es por ello que retorna a Rosario en Julio del 2012 para estar presente en el primer dia de la pretemporada 2012-13 bajo las órdenes de Miguel Angel Russo. Al no ser tenido en cuenta por el nuevo cuerpo técnico, Ballo decide buscar un club donde pueda tener mas continuidad y se incorpora a prestamo por un año a Atlético Tucumán para disputar la temporada Nacional B 2012-13.
En Atlético Tucumán, tuvo una temporada más que interesante: Jugó 31 encuentros con la camiseta del Decano – todos ellos como titular –, fue el cuarto jugador con más presencias detrás de Barone, Barrado y La Pulga Rodríguez (con la salvedad que por cláusula no jugó los dos ante Central y estuvo tres fechas afuera por suspensión) y hasta se animó a convertir dos goles, pese a ser un jugador de características defensivas.
Para la temporada 2013-2014, defendió los colores de Rosario Central en 17 partidos, de los cuales en 8 fue titular. Sin el aval de los hinchas, comenzó a pasar el tiempo, las chances de arranque aparecieron (jugó ocho partidos como titular) y los rendimientos distaron mucho de los mejores. Así, el balance terminó siendo negativo y después de entrenar algunos días con reserva, Ballini terminó su contrato con el conjunto auriazul y ahora tendrá la oportunidad en Colón, jugando el Nacional B.