Nos hemos permitido incluir un enlace para informar a nuestros lectores lo que se entiende por permiso penitenciario.
El 25 de junio de 1992, el pueblo de la pequeña se encontraba en fiestas, las de San Juan y San Pedro. Juan Manuel Valentín Tejero de 32 años, del que hablamos en este artículo residía en el barrio de la Fuente del Sol en Valladolid y ayudaba a su madre en un kiosco de prensa que poseía ella, estaba con un permiso carcelario de seis días que el juez Ignacio Sánchez Yllera le otorgó.
El 30 de Junio de 1992 el periódico “El país” cuenta que el ex juez lamenta profundamente el drama humano que se desencadenó y añade que el sujeto ya había disfrutado de permisos aunque la psicóloga de la prisión lo desaconsejó, pero al juez, en lugar de ser sancionado por esto que él mismo causó, ascendió a magistrado del Tribunal Constitucional a los 5 días de la desaparición de la niña, durante dos años, fue Jefe de Gabinete de María Teresa Fernández de la Vega entre 2004 y 2005 antes de ser destituido.
La niña había hecho ese año su 1ª Comunión y aquella noche pidió a sus padres que la dejasen llegar a casa una hora más tarde de la habitual. Lo que no sabían era que nunca la volverían a ver con vida. La misma noche Juan Manuel Valentín Tejero la raptaría, violaría y mataría.
Desde el primer momento la policía sospechó de él; aunque Pascual Sala Sánchez presidente del Consejo General del Poder Judicial manifestó posteriormente que Valentín Tejero no tenía antecedentes por violación sino por abusos deshonestos a menores. El juez de guardia de Valladolid Manuel García Castellón, se trasladó con el sospechoso a Villalón, en donde se llevó a cabo una rueda de reconocimiento secreta para evitar que los vecinos intentaran linchar al sospechoso. Y se alojaron en un hotel de dicha localidad.
Después de 4h. de interrogatorio éste acabó confesando, le había pedido a la niña que le ayudara a colocar unos carteles para una caza del zorro, este fue su final, ya que la violó anal, vaginalmente y la golpeó en la cabeza con una barra de hierro.
El cuerpo de Olga apareció el sábado 27 de Junio de 1992, a unos cinco km. de Tudela de Duero y a setenta de Villalón, enterrado a poca profundidad, en una zona de difícil acceso de un pinar. Su presunto asesino estuvo presente en el levantamiento del cadáver.El análisis forense confirmó que Olga había fallecido al ser golpeada con una barra de hierro en la cabeza, después de que el asesino intentara estrangularla.
El 10 de septiembre de 1993, tuvo lugar la vista oral del juicio en la audiencia vallisoletana. Valentín Tejero dijo que golpeó a la niña con una barra de hierro y que sólo recordaba haberle introducido los dedos en la vagina, interrumpió el juicio para llorar.
El reo sufre atracción hacia los menores pero es consciente de sus actos.
Actualmente no apunta ninguna mejoría, pasa las horas esperando que llegue su puesta en libertad y no le interesa reinsertarse, la cárcel debe cumplir una doble función. Por un lado, proteger a los que saben convivir en armonía con sus conciudadanos de aquellos que se saltan las normas que entre todos hemos aprobado para no vivir en la ley de la jungla. La otra, vital en el sistema, es la reinserción de los que han cometido delitos para que puedan volver a la sociedad e integrarse en ella.
El 24 de febrero del 2012, a través de su abogado de oficio, hizo llegar a “EL MUNDO” una breve declaración: “Pido perdón a todas las víctimas y familiares de los crímenes que cometí. Desde mi entrada en la cárcel, he tratado de hacer lo posible por mi reinserción, de forma que, cuando salga en libertad, pueda salir con las máximas garantías, estando en la actualidad completamente arrepentido de todo mi pasado delictivo”. Un perdón y un arrepentimiento tardío que no devolver la vida a la pequeña Olga Sangrador.
A continuación os dejamos una escueta lista de personas asesinadas a finales de siglo XX.
Via Elmundo
http://www.ivoox.com/tertulia-redaccion-samsung-galaxy-s4_md_1871963_1.mp3 Madre de Olga Sangrador “En casa de Herrero” el 15/03/2013.
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Declaración de una vecina en el día de Valladolid.com
«Aquí tiene derechos el que mata, nunca el que muere».