2.557 empleadas del hogar vallisoletanas se beneficiarán del Régimen General en 2.012

Por Hogaradas @hogaradas

Dignificar la situación del personal del sector doméstico es el objetivo principal del Proyecto de Ley de Regulación Laboral que entrará en vigor el próximo 1 de enero de 2012 y que supondrá la integración del régimen especial de empleadas del hogar en la Seguridad Social. Esta decisión es fruto del acuerdo al que llegaron Comisiones Obreras y la Unión General de Trabajadores con el Gobierno central a finales del pasado junio.
Gracias a esta reforma legal, las 2.557 vallisoletanas que se dedican a este sector -según datos facilitados por los sindicados- verán sus derechos acercarse a los del resto de trabajadores. Se trata de una reivindicación histórica, ya que hasta ahora las empleadas del hogar se regían por una normativa laboral de 1985. Una de las medidas principales de la enmienda es el derecho a cotización por todo el tiempo de trabajo y al cobro de la baja por enfermedad desde el cuarto día, como el resto de trabajadores, y no como en la actualidad, que está penalizado con una espera de 29 días. En la mayoría de los aspectos contemplados se ha producido un gran avance en la ampliación de los derechos, aunque quedan dos asuntos sin cerrar, que son una posible protección por desempleo y las deducciones fiscales en favor de los empleadores.
Comisiones Obreras estima en 11.526 las personas afiliadas a la Seguridad en todo Castilla y León, de las cuales más del 90% son mujeres. Las cifras nacionales elevan a 298.377 las cotizantes del sector doméstico, de las que el 65% son extranjeras.
Debido a este refuerzo en sus derechos, UGT prevé que el número de empleadas del hogar afiliadas a la Seguridad Social aumente en los cinco ańos que tardará en efectuarse la adaptación del régimen especial de empleadas domésticas al régimen general de la Seguridad Social. Es decir, que se augura que la mayoría de los, aproximadamente, 400.000 empleos sumergidos que tiene este sector en Espańa saldrán a la luz a partir de 2012.
Desde el 1 de enero del ańo que viene, las empleadas del hogar podrán exigir que su contrato se haga por escrito. Cotizarán desde la primera hora trabajada y no a partir de las 20 horas semanales, como ocurre en la actualidad, aunque es cierto que ahora tienen la opción de pagarse ellas mismas las cuotas si trabajan al menos 72 horas mensuales para más de un hogar. El empleador será el encargado de inscribir en la Seguridad Social a su personal doméstico y deberá darse de alta en el registro de empresarios presentando la afiliación, el alta y el contrato de la empleada. Si la asalariada trabaja en varias casas, cotizará por separado lo que le corresponda. El periodo de transición para esta iniciativa es de seis meses a partir de la entrada en vigor de la reforma.
En caso de baja de incapacidad temporal, la empleada percibirá la retribución desde el cuarto día, en lugar de tener que esperar al vigésimo noveno, y hasta el octavo día correrá a cargo del empleador. La reforma se completa con el derecho a dos pagas extraordinarias anuales, cuya cuantía no será inferior al Salario Mínimo Interprofesional mensual, que es de 641,40 euros al mes. Las jornadas laborales se mantendrán en 40 horas por semana, con un descanso de 36, que no podrán ser interrumpidas. Las trabajadoras disfrutarán de un mes de descanso anual que no podrá coincidir con las vacaciones de la familia del hogar, al contrario que en la actualidad.
Lamentablemente, aún queda sin regular una posible protección por desempleo. Esta cuestión se analizará a lo largo del próximo ańo para poder tomar una decisión definitiva en 2013.

Fuente 

Fotografía Susana Vera / REUTERS