Zavala también dijo que diez personas resultaron heridas, tres de las cuales debieron ser hospitalizadas, mientras que varios bomberos y un policía sufrieron golpes de diferente consideración cuando atendían la emergencia.
"Ninguna persona ha resultado herida por quemaduras, la mayoría han muerto por asfixia. Hemos cumplido nuestra labor como bomberos de rescatar a las víctimas, pero las puertas estaban totalmente cerradas", afirmó el jefe de los bomberos.
El incendio movilizó a 15 unidades de bomberos y afectó a la primera planta de la vivienda en la que permanecían las víctimas que, según la información de periodistas y testigos, iniciaron una gresca cuando intentaron huir del centro de rehabilitación.
Un sobreviviente del centro, identificado como Gianfranco Huertas, declaró a la emisora Radio Programas del Perú (RPP) que unos internos del primer piso le prendieron fuego a unos trapos para exigir que los dejaran salir del lugar.
"Ellos quisieron escaparse y comenzaron a arrojar trapos encendidos, porque la puerta estaba cerrada con llave", detalló Huertas, quien escapó ileso junto a otro grupo de personas que se encontraban en el segundo piso del local.
Según los vecinos de la zona, en el lugar había unas 60 personas, a pesar de que todas las informaciones señalan que el centro no contaba con la autorización de las autoridades.
El centro de rehabilitación se encontraba en la primera cuadra de la Avenida Próceres de la Independencia, en San Juan de Lurigancho, el distrito más grande de Lima, con cerca de un millón y medio de habitantes.
Fuentes: efe.com