Jim despierta del coma en una cama de un hospital londinense y descubre que toda la ciudad está desierta. Un virus altamente contagioso se ha extendido por toda Gran Bretaña. Las personas que se ven afectadas por él, se convierten en escasos segundos en seres muy agresivos. En veintiocho días el virús ha afectado a la práctica totalidad de los habitantes de la isla.