Ahora le toca al cine clase B con "Frankenhooker" (1990), de Frank Henenlotter y protagonizada por James Lorinz.
¿De qué la va? Un neo-Frankenstein de 21 años pierde a su prometida en un "accidente de podadora" y decide devolverla a la vida en un cuerpo hecho con partes de prostitutas.
¿Dónde está el terror? En todo lo que dije antes y en la cantidad de gente que explota con un más que divertido bajo presupuesto.
¿Con qué voy a soñar? Soy una cabeza sin cuerpo, como Futurama pero sin el frasco simpático, y no puedo hacer nada solo.
¿Qué aprendí? Que si tengo una idea dando vueltas en la cabeza, una buena forma de sacarla es con un taladro.
¿Qué sería del 28 Nights Before sin el cine de clase B? Una película divertida, con referencias de otras grandes películas de terror, es necesaria cada tanto para relajar mi cerebro y que mis neuronas no entren en pánico y se maten entre ellas (o sea, una contra la otra)...
La recomendación de La Cosa pueden verla en su página.
Acordate que el 28 Nights Before no es sólo un conjunto de reseñas, sino una experiencia completa que podés seguir en su minuto a minuto en Twitter a través del hashtag #28NightsBefore.
Si te gustó este artículo puedes nominarnos en los premios de Bitacoras, categoría cultura!